Ocho muertos en un motín de Al Qaeda en una prisión de Kabul

El Ejército afgano asaltó ayer la principal prisión de Kabul después de que un intento de fuga de varios presos de Al Qaeda se convirtiese en un motín. Al menos ocho personas, cuatro guardias y cuatro presos, murieron en los enfrentamientos, informó el Ministerio del Interior afgano, que dio el motín por terminado tras la muerte de los dos últimos presos que resistían en el interior de la cárcel de Pul-i-Charki.

Cuatro detenidos -tres paquistaníes y un iraquí- atacaron y mataron por la mañana a uno de los guardias de la prisión, armados con cuchillas de afeitar, y después le arrebataron su fusil de asalto AK-47. Los primeros enfrentamientos causaron tres muertos entre los guardias y dos entre los detenidos (un paquistaní y un iraquí). El alcaide de la prisión, el general Abdul Bajshi, dijo que los prisioneros fueron detenidos en Kabul por su relación con Al Qaeda.

Los otros dos presos resistieron durante varias horas en medio de intensos tiroteos con los 200 policías que rodearon el lugar donde se habían atrincherado. Finalmente, fuerzas del Ejército afgano asaltaron el recinto y mataron a los dos prisioneros. Pul-i-Charki es una inmensa prisión situada en las afueras de Kabul.