El Consell asegura que no hará nada en el Teatro Romano de Sagunto hasta conocer el fallo del Supremo

El Consell aseguró ayer que no realizará ninguna actuación en el Teatro Romano de Sagunto hasta conocer el fallo del Tribunal Supremo sobre el recurso presentado por el Ayuntamiento de esta localidad al auto que contempla la reversión de las obras de rehabilitación diseñadas por los arquitectos Giorgio Grassi y Manuel Portaceli, según informaron ayer fuentes de la Generalitat. Vicepresidencia salió así ayer al paso de las manifestaciones del abogado y ex diputado del PP Juan Marco Molines, autor del recurso contra la intervención en el monumento, en las que afirmaba que el Consell había encargado al arquitecto saguntino Francisco Muñoz Antonino la elaboración de un anteproyecto que establezca el tiempo y el dinero necesarios para llevar a cabo la reversión de las obras de restauración en el teatro.

Sin embargo, fuentes de vicepresidencia del Consell aseguraron que no se ha realizado ningún encargo sobre este asunto y, aunque señalaron que ha habido conversaciones al respecto, insistieron en que el ejecutivo no tomará ninguna decisión hasta conocer el fallo.

Marco Molines matizó sus palabras y señaló que "lo que hay es un encargo verbal para realizar un estudio previo sobre cuánto se tardaría en ejecutar el proyecto y cuánto costaría y sobre esa base seguir". No se trata de una encomienda entendida "como firma de la hoja de encargo del Colegio de Arquitectos" sino como un "acuerdo verbal", recalcó. Sobre el recurso del Consistorio saguntino, Marco Molines manifestó que no le consta que haya llegado al Supremo.

El TSJ de la Comunidad Valenciana ordena en un acto levantar las placas de mármol que cubren las gradas del auditorio y derribar el muro del escenario hasta fijarlo a una altura de 1,20 metros con la finalidad de devolver el Teatro a su estado anterior a la intervención.

Por su parte, el director general de Patrimonio, Manuel Muñoz, reiteró que no se iniciará la reversión del teatro romano de Sagunto hasta que el Supremo no se pronuncie sobre el recurso de casación que presentó el Ayuntamiento para que ese proceso no se llevase a cabo. El plazo impuesto por la sentencia del TSJCV para realizar la reversibilidad de las obras del Teatro, cuya ilegalidad fue declarada en 1993 por este tribunal y confirmada en octubre de 2001 por el Supremo, finaliza el próximo sábado.