Sanz pidió para firmar el acuerdo garantías de control de la información del PP en Canal Sur

El resonsable de Organización del PSOE, Luis Pizarro, confirmó ayer que el secretario general del PP, Juan Ignacio Zoido, y el portavoz parlamentario, Antonio Sanz, vincularon su apoyo al acuerdo sobre el impulso democrático a la búsqueda de una salida a la crisis de la Diputación de Almería.

También el PP pidió "otras cosas" en relación a la RTVA. Además de un acuerdo "firmado" sobre el futuro director general del ente púlico y del jefe de informativos, Sanz pidió al consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, garantías para controlar la información del PP en Canal Sur TV, de manera que, como es habitual en campañas electorales, el PP marcara diariamente qué actos se deben cubrir y que dirigentes deben salir. Pizarro, en conferencia de prensa, no dio detalles de estos datos que, sin embargo, confirmaron fuentes del PSOE y del PP. "No vamos a pastelear con nadie ni va a haber reparto de responsabilidades en Canal Sur. Ni con el PP, a pesar de algún intento, ni con IU y PA, que no lo han intentado", dijo Pizarro, quien aseguró que será el Parlamento el que proponga el director general y que éste tendrá libertad para elegir a su equipo.

El PSOE se desprendió ayer del "ataque de talante" que ha mantenido estos días a la espera de que el PP firmara el acuerdo sobre el impulso democrático, una vez que los conservadores decidieron el jueves desligarse del pacto en el que han estado trabajando tres meses. "A Arenas le importa un pito y un pimiento Andalucía, su única obsesión enfermiza es debilitar a Chaves", aseguró Pizarro, quien acusó al presidente regional del PP andaluz de "desautorizar" y "dejar en el más absoluto de los ridículos" a su portavoz parlamentario.

Los socialistas siempre han reconocido la dedicación al trabajo político de Sanz, pero ayer de la boca de Pizarro sólo salieron reproches en dirección al popular. "Si yo fuera él, que no lo soy, no habría tardado ni cinco minutos en presentar mi dimisión", dijo.

Pizarro no se mostró parco en calificativos en dirección a Arenas, al que llamó "frívolo", "irresponsable", "director de una sucursal" del PP nacional y autor de una "estrategia repugnante para manchar la imagen de los políticos". También contó que Arenas mantuvo "más de una reunión" con el presidente de la Junta para abordar los temas del acuerdo. Según fuentes socialistas, Arenas y Chaves mantuvieron al menos dos entrevistas de las que no se facilitó información. Estos interlocutores indicaron que fue Arenas el que propuso regular los estatutos de los ex presidentes, extremo que confirmaron dirigentes del PP, y que se comprometió a "no jugar políticamente con este asunto".