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El Gobierno critica a la Generalitat por el retraso de la modernización de regadíos en el Júcar

Los regantes piden a las administraciones que se coordinen y cumplan los compromisos

El Gobierno ha criticado el retraso de las obras de modernización de regadíos que corresponden a la Generalitat y de las que dependen importantes ahorros de agua. Para el Ejecutivo socialista, "es una evidencia el bajo nivel" de ejecución de las obras previstas por el Consell en la Acequia Real del Júcar, según indica en una respuesta parlamentaria. La Administración central y la autonómica se repartieron las inversiones y el Ministerio de Medio Ambiente afirma que prácticamente ha cumplido con su parte. El trasvase al Vinalopó se aprobó condicionado al ahorro en el riego.

El Gobierno central asegura que "es una evidencia el bajo nivel" de ejecución de las obras de modernización de la Acequia Real del Júcar en la parte que corresponde a la Generalitat Valenciana, mientras que el Ministerio de Medio Ambiente ha cumplido sus compromisos, a falta de un proyecto complementario a las obras en el canal principal. El Ejecutivo asegura también que los regantes solicitan que las administraciones implicadas coordinen sus actuaciones y que cumplan los compromisos, y considera "imprescindible" la "sincronización en la finalización de las obras".

Las obras de modernización de la Acequia Real del Júcar pretenden sustituir el riego a manta por el de goteo, así como la automatización de la red para mejorar la eficiencia y el ahorro del agua, según recuerda el Gobierno en una respuesta parlamentaria a una pregunta del diputado del grupo popular en el Congreso Ignacio Gil Lázaro. El parlamentario se interesó por la intermediación del Ministerio de Medio Ambiente ante la Generalitat solicitada por los regantes del Júcar para impulsar la modernización de regadíos, que sufre un importante retraso.

En la contestación, que lleva fecha del 22 de noviembre, el Gobierno explica que, frente al retraso de la Generalitat en atender la fase de modernización que permite la definitiva puesta en marcha del sistema de goteo, al Ministerio de Medio Ambiente, que dirige Cristina Narbona, sólo le falta realizar un proyecto de terminación, que supone una inversión de 13.800.000 euros y está previsto que finalice antes de fin de año para que las obras comiencen en enero de 2005 y se completen en 18 meses.

Para que la modernización de la acequia entre en funcionamiento son necesarias las obras que corresponden a la Consejería de Infraestructura y Transporte y la de Agricultura, que tienen "un porcentaje de ejecución muy bajo", según el Gobierno. Mientras no se finalicen, dice el Ejecutivo, "los regantes valencianos no están dispuestos a trasvasar agua al Vinalopó sin el ahorro de la modernización y esto lo manifestó el presidente de la Unión Sindical de Usuarios del Júcar (USUJ) a la ministra de Medio Ambiente cuando visitó Valencia en junio".

Los regantes solicitan que las administraciones implicadas coordinen sus actuaciones y que cumplan sus compromisos, que en este caso son objeto de convenios firmados entre ellos y la Generalitat, según se recoge en la contestación parlamentaria. Asimismo, en el escrito el Gobierno considera "imprescindible" la sincronización en la finalización de las distintas obras para que todas entren en funcionamiento al mismo tiempo.

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Los responsables de la Acequia Real del Júcar -que riega en torno a 20.000 hectáreas- han criticado reiteradamente en los últimos años la lentitud de las obras y han recordado que, además del ahorro de agua en un sistema hídrico que está tensionado al máximo, los regantes aceptaron apoyar el trasvase al Vinalopó de un máximo de 80 hectómetros cúbicos anuales precisamente porque la Administración les aseguró que se compensarían con la modernización del regadío. Los dirigentes de la Acequia Real y de USUJ, de la que forman parte, se quejaron de nuevo el pasado febrero, cuando el Gobierno del PP inauguró la remodelación del canal principal del sistema. "Les pido prisa para que no se duerman", afirmó entonces Manuel García de la Cuadra, vicepresidente de la Acequia Real. No en vano, siguen pendientes dos fases para la conexión del riego por goteo.

La semana pasada, el presidente de la Sociedad Estatal de Estructuras Agrarias, Francisco Rodríguez, también denunció que el Consell "ha incumplido su compromiso". De los 46 sectores en los que se ha dividido la zona a modernizar, la Generalitat "sólo está ejecutando tres", cuando las actuaciones debían estar terminadas este año, aseguró.

El presidente de la CHJ, Juan José Moragues, expresó su preocupación por los retrasos el pasado julio, recién nombrado. Moragues afirmó que la Generalitat apenas ha ejecutado el 10% de la infraestructura que tiene encomendada, la modernización de la red a partir de la conducción principal. El PP incluyó la modernización de las acequias de Quatre Pobles, Sueca y Carcaixent en el anexo de obras del Plan Hidrológico Nacional (PHN), pero no les dio presupuesto. Son las obras pendientes a las que hace mención el Gobierno en su respuesta parlamentaria.

Agua para los humedales

La modernización del regadío está asociada a una mayor eficiencia y al ahorro de recursos, pero es también un arma de doble filo. El agua que en el riego a manta se pierde porque no la aprovechan los cultivos, es precisamente la que alimenta a los humedales, que se nutren de sobrantes, escorrentías y las filtraciones a los acuíferos. En el caso del Júcar, el humedal más importante afectado por el ahorro es L'Albufera, cuyo equilibrio hídrico lleva más de un siglo estrechamente unido a la Acequia Real, su principal fuente de alimentación.

La introducción del riego por goteo permitirá ahorrar un importante caudal, parte del cual esperan los agricultores del Vinalopó. Los regantes del Júcar insisten en que la inversión prioritaria debe dirigirse al ahorro, porque sin él no se puede trasvasar agua al Vinalopó. El Plan Hidrológico del Júcar (PHJ), en el aire tras una sentencia del Tribunal Supremo que anuló importantes artículos sobre la asignación de recursos, entre ellos al Vinalopó, establece una reserva de 100 hectómetros cúbicos al año para L'Albufera como compensación a la mengua de retornos de riego. La Comisión Europea, sin embargo, ha establecido como condición para cofinanciar las obras del trasvase al Vinalopó que se fije un caudal ecológico para el Júcar, "de una importancia vital para la supervivencia de L'Albufera". La administraciones central y autonómica también prevén llevar a L'Albufera aguas depuradas de Pinedo y otras estaciones, si bien necesitarán de un tratamiento terciario para garantizar la calidad.

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