El Gobierno autoriza que los sanitarios puedan jubilarse a los 70 años

La Consejería de Sanidad ha decidido permitir a los empleados del Imsalud que lleguen a los 65 años y deseen prolongar su vida laboral hacerlo hasta los 70. La medida, a la que puede sumarse cualquier empleado del Imsalud, está pensada especialmente para los médicos y pretende evitar lo que amenaza con convertirse en un problema para la sanidad pública: la escasez de facultativos en algunas especialidades -como la cirugía cardiovascular, la pediatría o la neurocirugía-. Sanidad ha detectado que hay muchos profesionales en activo próximos a su jubilación y sin que esté asegurado su relevo.

"Muchos profesionales y médicos especialistas en Madrid empezaron a trabajar en los años sesenta y setenta, con la construcción de los grandes hospitales públicos. Son facultativos con gran experiencia y óptima formación y que ahora llegan a la edad de jubilación. Ningún sistema sanitario puede permitirse el lujo de prescindir de este capital humano si los propios médicos quieren trabajar unos años más y están en las condiciones óptimas para hacerlo", explica el director general de Recursos Humanos de Sanidad, Armando Resino.

Madrid es la primera comunidad autónoma en adoptar esta medida, en vigor desde el pasado 30 de noviembre, un día después de que fuera publicada en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid. En España, la jubilación a los 65 años no es un deber sino un derecho, salvo en los casos (como éste) en los que está fijada, en convenio colectivo, una edad máxima de trabajo.

Carlos Amaya, representante de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), apunta otra razón que explica la medida para prorrogar la vida laboral de los profesionales de la sanidad pública y que es una vieja reclamación del sindicato: permitir a los médicos completar los 35 años de cotización a la Seguridad Social para tener derecho a la máxima pensión.

"Hay que tener en cuenta la larga formación de los médicos, que supera los 10 años. Esto ha hecho que muchos no empezaran a cotizar hasta pasados los 30 años, lo que hasta ahora les impedía llegar a los 65 años con 35 en activo", aclara Carlos Amaya.

A la vez que ha adoptado esta medida, Sanidad ha iniciado una investigación a fondo de los recursos humanos con los que cuenta, su evolución futura y las necesidades del sistema sanitario público en las próximas décadas. Este estudio, denominado Plan de Ordenación de Recursos Humanos, es otra vieja reclamación de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos.

"La sanidad pública no ha tenido durante años la planificación debida para saber cuántos médicos y de qué especialidades eran necesarios para las necesidades de la población", declara Amaya. "Este plan cubrirá está laguna", añade.

Por su parte, Armando Resino avanza que el plan estará terminado antes de que acabe la legislatura, en 2007.

Concesión automática

La prolongación de la vida laboral será concedida por la consejería de Sanidad de forma automática a todos los médicos, enfermeros y demás profesionales de los centros de salud y hospitales hasta que se acabe el plan de ordenación.

"Cuando lo tengamos completado podremos predecir con años de antelación las necesidades de médicos de la sanidad pública y entonces la prolongación de la vida laboral se concederá preferentemente a aquellas especialidades con mayores necesidades de personal", aclara el director general de Recursos Humanos. La resolución adoptada por Sanidad desarrolla, dentro de las competencias transferidas a las comunidades autónomas, varios aspectos del Estatuto Marco del Personal Estatutario (funcionarios de la sanidad pública) que permiten prolongar la vida laboral de los empleados sanitarios.

El Estatuto Marco obligaba de forma forzosa a todos ellos a jubilarse al llegar a los 65 años de edad excepto en determinadas condiciones, que son las que ahora ha desarrollado la consejería de Sanidad.

Esta medida no es la única importante adoptada por Sanidad en las últimas semanas en materia de recursos humanos. El Gobierno regional ha acordado con los sindicatos adoptar la jornada de 35 horas semanales, ya implantada para los profesionales del Imsalud, también para los médicos residentes o en formación.

Igualmente, Sanidad firmó el acuerdo de convertir en estatutarios a los trabajadores del hospital Carlos III, transferido hace dos años al Gobierno regional desde el Ministerio de Sanidad y muchos de cuyos trabajadores no disfrutaban de las condiciones laborales de sus colegas de la sanidad pública.

Por último, el Gobierno regional ya ha ordenado también el pago del primer trimestre de sobresueldos para los empleados de los hospitales públicos que participen en el Plan de Reducción de las Listas de Espera.

Las cantidades cobradas por los médicos van de los 182 a 251 euros; los diplomados en enfermería, de los 110 a los 150 euros; los técnicos, de 56 a 77 euros, y las demás categorías, de 34 a 71 euros.