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El consejo del BBVA cierra filas contra el intento de Sacyr de entrar en el banco

Francisco González reunió a sus consejeros tras suspenderse la entrevista con Luis del Rivero

El consejo de administración del BBVA, reunido en sesión extraordinaria, cerró ayer filas a propuesta de su presidente, Francisco González, para oponerse al intento de la constructora Sacyr Vallehermoso de entrar en la gestión de la entidad. En un comunicado enviado a la Comisión de Valores (CNMV) y difundido a la prensa, el banco considera que no aportaría estabilidad y "que no existen motivos para tomar en consideración la eventual petición de Sacyr de incorporar representantes al consejo". Asimismo, subraya que en Sacyr hay personas vinculadas a competidores como el Santander y algunas cajas.

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El presidente del BBVA, Francisco González, estaba preparado ayer en su despacho de la sede madrileña del banco para la entrevista con el de Sacyr, Luis del Rivero, que debía tener a las 10.00 horas. Sin embargo, antes de la hora convenida, éste llamó a González para anular el encuentro alegando que quería esperar la respuesta del Banco de España a su petición de aclaración. La negativa de Del Rivero a la entrevista generó malestar en el presidente de la entidad financiera, que esperaba tener precisión sobre la oferta de la constructora, según fuentes del entorno de ésta.

González convocó, entonces, formalmente un consejo de administración extraordinario para las 13.00 horas, que se celebró con la ausencia de Richad Breeden (residente en Estados Unidos) e Ignacio Ferrero (de viaje en China con su empresa, Nutrexpa). Según fuentes del banco, González ya había anunciado la noche anterior a alguno de los consejeros la posibilidad de que se celebrase el consejo por la mañana para analizar la propuesta de la constructora, consistente en la adquisición del 3,1% del capital del banco y tener representación en el máximo órgano administrativo.

Algunas fuentes externas calificaron ayer la reacción del presidente del BBVA "como un enroque" para garantizar la permanencia al frente de la entidad.

El consejo ratificó, "por unanimidad de los presentes", el rechazo ya mostrado por la cúpula del banco al intento de entrar por parte de Sacyr. En un comunicado de algo más de dos folios que se repartió a la prensa y se entregó en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) como hecho relevante y en el que se tuvieron en cuenta matizaciones solicitadas por alguno de los consejeros, el consejo califica de "anómalo" el proceso seguido por Sacyr y, tras referirse a "divulgación de rumores, noticias contradictorias y especulaciones informativas", lanza su primer acometida: "Actuaciones como las de los responsables de Sacyr Vallehermoso no ayudan a generar confianza en el adecuado funcionamiento de los mercados de capitales españoles y perjudican su imagen internacional".

El comunicado reafirma que el consejo concede "al actual equipo de gestión", en conjunto,su "absoluta confianza". En ese sentido, resalta que el banco "está abierto a cuantos inversores deseen participar en este proyecto empresarial que cuenta actualmente con más de un millón de accionistas". Un 50% de esa inversión, según el banco, está en manos de instituciones internacionales.

Pero no parece, a juzgar por la dureza del comunicado, que entre esos inversores a los que el BBVA está abierto figure el grupo Sacyr Vallehermoso. Es más, el consejo considera que la pretensión de la constructora "no resulta conveniente para los intereses de BBVA, de sus accionistas, empleados y clientes, ni se ajusta al modelo de gobierno corporativo que el banco ha decidido imponerse".

El consejo hace también hincapié, en ese punto, en que las pretensiones de Sacyr y su relación epistolar con el Banco de España hayan sido difundidas como hechos relevantes por la CNMV, circunstancia que se consideró extraña en el entorno de la propia entidad y de la máxima autoridad bancaria.

Sobre la base de las exigencias de gobierno corporativo a las que alude, el comunicado resalta que "la participación [compra del 3,15% por parte de Sacyr y del 0,47% por parte de Juan Abelló y Demetrio Carceller, accionistas y consejeros de la constructora] no otorgaría a ese grupo de accionistas derecho a asignar siquiera un sólo miembro del órgano de administración del banco, ya que para ello precisarían la propiedad de al menos el 6,25% del capital, además del cumplimiento de los restantes requisitos legalmente exigibles". El consejo del BBVA, que cuenta con 15 representantes sobre un máximo admitido de 16, controla en torno al 1,3% del banco. De ese total, Telefónica posee el 1,2%, según fuentes de esta compañía, y González el 0,034%.

"En consecuencia", continúa, "la incorporación al consejo debería justitificarse por otras razones distintas de la participación en el capital social que la hicieran aconsejable y conveniente para los intereses del banco". A juicio del consejo presidido por González, "no se aprecia la concurrencia de ninguna de tales razones".

Por si esas aseveraciones fueran pocas, el comunicado incide en que la incorporación del grupo pretendiente "no aportaría estabilidad adicional a la base accionarial del banco". "Difícilmente puede garantizar una apuesta permanente, continuada y no especulativa en esa inversión", añade. Y completa la andanada: "Al contrario, esta participación seguiría la eventuales vicisitudes que pudieran presentarse en los negocios principales y en la composición accionarial de Sacyr". Por ello "no se le podría considerar como un inversor de referencia para una entidad de la dimensión y trascendencia que BBVA tienen en los mercados en que opera".

Presencia de competidores

No son tampoco aconsejables "las características financieras de la operación" y advierte a los accionistas de Sacyr "del elevado endeudamiento" que supone la operación para su empresa. Desde su perspectiva no parece tener sentido que el consejo "dependa de una estructura no exenta de riesgo".

Para el BBVA, aceptar esa propuesta en los términos conocidos no sólo iría en contra del modelo, sino también provocaría conflictos de intereses con sus competidores "difícilmente reconciliables con los principios del buen gobierno corporativo". Se refiere el consejo a las participaciones de "personas vinculadas al Banco Santander, Caixa Galicia y otras cajas de ahorros que compiten directamente con el BBVA. En concreto, Juan Abelló está en el consejo del Santander y, de prosperar sus pretensiones, tendría que dejar ese puesto.

Francisco González, en una comparecencia en  febrero pasado.
Francisco González, en una comparecencia en febrero pasado.CLAUDIO ÁLVAREZ

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