Paralizada la entrega a España de un supuesto miembro de Al Qaeda
La Audiencia procesó al hombre de Bin Laden en Alemania por el 11-S
La abogada del comerciante sirio alemán Mamoun Darkazanli, Abu Ilyas, reclamado por la Audiencia Nacional por su relación con la célula española de Al Qaeda que dirigía Imad Eddin Bakarat, Abu Dahdah, presentó ayer un recurso ante el Tribunal Constitucional alemán que paralizó su entrega a España. La llegada de Darkazanli estaba prevista para ayer, pero se pospuso gracias a que el Constitucional admitió por la tarde un recurso de amparo, urgente y con efecto suspensivo, que aplaza la extradición hasta que el tribunal decida sobre el fondo de la cuestión.
La portavoz del Constitucional, Gudrun Schraft-Huber, explicó a Efe que la aceptación de ese recurso es una decisión que tiene una validez máxima de seis meses, si bien no pudo precisar cuándo emitirá el tribunal su dictamen definitivo sobre el caso, y adelantó que divulgará la próxima semana un comunicado para precisar los motivos que llevaron a los jueces a aceptar el recurso.
Darkazanli será interrogado por el juez Baltasar Garzón sobre las relaciones de Abu Dahdah con los autores del 11-S y por el apoyo logístico que prestaron los miembros de esta red española a los pilotos suicidas.
Mamoun Darkazanli, de 46 años, es natural de Damasco, reside en Hamburgo (Alemania) desde hace varias décadas y es amigo íntimo de Abu Dahdah, el jefe de la célula española desarticulada por la Policía en noviembre de 2001. Cuando Garzón procesó en 2003 a los miembros de este grupo que recaudaban dinero y enviaban muyahidin a Bosnia y Afganistán incluyó el nombre de Darkazanli. Le acusa de pertenencia a banda terrorista y de apoyo logístico y financiero a Al Qaeda.
Investigaciones archivadas
Los servicios de inteligencia de varios países coinciden en afirmar que este sirio calvo, barbudo y delgado ha sido durante años el hombre de Bin Laden en Alemania, aunque todos los procesos que se abrieron en ese país contra él fueron archivados. Se le detuvo semanas después del 11-S cuando la policía criminal alemana BKA descubrió que mantenía excelentes relaciones con Mohamed Atta y el resto de los pilotos suicidas.
Darkazanli asistió a la boda de Said Bahaji en la mezquita de Quds, un vivero de radicales islamistas. Bahaji es uno de los miembros de la célula de Hamburgo que no pudo participar en el ataque terrorista porque las autoridades norteamericanas le negaron varias veces el visado. En un vídeo grabado ese día aparece sentado junto a dos de los terroristas suicidas y a otros invitados. Bahaji huyó de Alemania días antes del 11-S y su rastro se perdió en un hotel de Karachi (Pakistán). La policía encontró el teléfono de Abu Dahdah en Fuenlabrada (Madrid) en el registro de su apartamento en Hamburgo.
El comerciante sirio alemán participó en la compra de un barco de carga y una emisora de radio para Osama Bin Laden gracias a sus relaciones con Salim Ahmed, uno de los tesoreros de Al Qaeda al que conoció en Pakistán. Trabajó en la empresa Tatex Trading Gmbh en Moordiek, una sociedad que se investigó en Alemania como presunta tapadera de la redes internacionales del extremismo islamista. Las diligencias judiciales de ese caso también se archivaron, pero afloraron datos interesantes. Mohamed Hady Tatary, estudiante de electrónica en la universidad de Hamburgo y uno de los investigados en aquella causa, reconoció haber visitado también a Atta y otros de los autores del 11-S en su apartamento de Marienstrasse.
Darkazanli ha dejado su rastro en asuntos relacionados con Al Qaeda en 11 países. Visitó España en varias ocasiones y siempre se alojaba en casa de Abu Dahdah. Otro de los procesados de la célula de éste, Mohamed Galeb Kalaje, también sirio, envió a Darkazanli 17.094 euros.
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