Los zaplanistas de Elche acusan a Ortuño de pucherazo y el subdelegado del Consell calla
Los campistas de Alicante y Elda elevan a la dirección nacional la impugnación del censo
La resaca de la bronca entre zaplanistas y campistas en la elección de los compromisarios de Elche estuvo ayer capitalizada por los primeros, mientras persisten las dudas sobre la validez de la fragmentaria votación, que concluyó con las urnas en comisaría. La portavoz zaplanista, Josefa Martín, acusó al líder de los campistas, el subdelegado del Consell, Manuel Ortuño, de intento de pucherazo y de orquestar los hechos para invalidar la votación y forzar la suspensión del congreso provincial. Ortuño calló. Los campistas anunciaron que llevarán las impugnaciones a la dirección nacional del PP.
Dos urnas con la votación incompleta siguen bajo custodia policial, en comisaría
La número dos del PP valenciano, Adela Pedrosa, pierde en su feudo de Elda
La foto del día después de la trifulca entre zaplanistas y campistas en Elche durante la elección de compromisarios para el congreso provincial revela, sin duda, el alcance del enfrentamiento interna: las dos urnas que salieron indemnes de la pelea siguen bajo custodia policial, en la comisaría. Además, un grupo de 21 militantes afines a Eduardo Zaplana ha cursado una denuncia por coacciones, amenazas y lesiones contra el cabeza visible del bando del presidente de la Generalitat. Los campistas insisten en su acusación de irregularidades en el censo y ponen como ejemplo el hecho de que hasta un asesor de Zaplana, Antonio Luis Martínez Pujalte, intentó que le votaran como compromisario sin estar incluido en la lista de los 94 candidatos.
Los líderes del sector zaplanistas, responsables de la organización del acto, a través de la portavoz del grupo municipal popular, Josefa Martín, fueron los primeros en retomar las hostilidades. Martín acusó a Ortuño de intento de pucherazo y de orquestar los incidentes. El subdelegado del Consell ayer calló y no aportó ningún otro argumento a su anuncio de la noche del lunes de impugnar la asamblea por "supuestas" irregularidades en el censo. Ortuño sostiene que el censo de Elche se ha incrementado en al menos 350 nuevos militantes que no residen en el municipio.
Martín mantiene que Ortuño, con el beneplácito del secretario regional de Organización, Enrique Crespo, retrasó a propósito el inicio de la votación y "orquestó" los incidentes. Según Martín, el objetivo de Ortuño era "boicotear" la elección de compromisarios de Elche y con ello obligar a la dirección del PP a suspender el congreso provincial. Crespo llegó incluso a dar por anulada la votación. No obstante el dirigente regional revocó su decisión ante la orden expresa en sentido contrario del secretario general nacional del PP, Ángel Acebes.
La portavoz del grupo municipal popular exigió una pronta resolución de los incidentes. A juicio de Martín, el órgano interno que ha de pronunciarse es el comité organizador del congreso provincial. El control del ente, que se reunirá hoy, está en manos de los zaplanistas que lidera José Joaquín Ripoll, presidente de la Diputación y hasta ahora único candidato a sustituir a Julio de España en la presidencia provincial del partido.
Las críticas de Martín a Ortuño fueron secundadas por José Joaquín Ripoll. Para el titular de la Diputación de Alicante, Ortuño no debería ocupar cargo público alguno porque, a su juicio, "es el instigador y responsable último de lo ocurrido ayer en Elche [la pelea de la noche del lunes]".
Los campistas difieren de Martín y aseguran que las impugnaciones presentadas a las votaciones en Alicante, Elche y Elda tienen que ser resueltas por los órganos competentes de la dirección nacional del partido. Las impugnaciones de las tres asambleas giran sobre el mismo argumento, manipulación del censo de militantes. El colectivo responsabiliza directamente de estos hechos a la actual dirección provincial.
A pesar de las impugnaciones, los partidarios de Camps asumen su derrota tanto en Alicante como en Elda. El caso de Elche está supeditado a que se dé por concluida la votación o, por contra, se repita.
Los campistas reconocen que en el caso de Alicante y Elda no han obtenido la mayoría de los compromisarios. En Elda la gran derrotada ha sido la nueva secretaria general del PP de la Comunidad Valenciana, Adela Pedrosa. Mientras, en Alicante, el alcalde, Luis Díaz Alperi, se ha vuelto a topar con la fuerza del aparato zaplanista que protege a Ripoll. Sin embargo, con independencia del porcentaje final de compromisarios a favor de unos y otros -Ripoll asegura que cuenta con el 86% de los compromisarios, entre los electos y los asignados automáticamente (600 de los 1.200 del total)- los campistas abogan por la suspensión del congreso provincial hasta esclarecer los incidentes de Elche y las impugnaciones de esa asamblea y las de Alicante y Elda. Los portavoces de este sector argumentan que los compromisarios de esos tres municipios representan un 22% del total de los que finalmente participarán en el congreso. "Es un porcentaje significativo y elevado como para acudir al congreso con dudas sobre la legalidad o no del proceso para su elección", subrayó un miembro de los campistas.
