El número de fumadoras adolescentes desciende el 12% en tres años

Las campañas antitabaco comienzan a surtir efectos entre los más jóvenes. El número de fumadores entre los adolescentes barceloneses, y sobre todo entre las adolescentes, comienza bajar de forma significativa. Un estudio realizado por la Agencia de Salud Pública entre estudiantes de 16 años ha revelado un descenso de 12 puntos en el porcentaje de chicas fumadoras y de 4,8 entre los chicos. El aspecto negativo es el aumento del consumo de hachís.

Hace sólo tres años, una encuesta realizada a un millar de estudiantes de 16 años de los institutos de la ciudad reveló que el el 23,9% de los chicos y el 37,8% de las chicas fumaban tabaco de forma regular. La misma encuesta, reformulada el pasado mes de abril, ha dado un resultado muy esperanzador para la lucha antitabaco. El índice de chicas fumadoras ha bajado 12 puntos y se ha situado en el 25,2%, y el de los chicos, en el 19,1%. Ellas siguen fumando más, pero también son las que mejor han asimilado el mensaje de que fumar es adictivo y les va a crear problemas en el futuro.

Entre los adolescentes más jóvenes, los de 14 años, el descenso también es importante, sobre todo en el apartado de consumo diario. Si hace cuatro años fumaban a diario el 4,5% de los chicos de esta edad, hoy lo hacen el 2,5%. Entre las chicas ha bajado del 18,1% al 13,3%.

Manel Nebot, coautor del estudio de la Agencia de Salud Pública, afirmó ayer que éste demuestra que "las cosas se están haciendo bien y que el hábito tabáquico comienza a descender en un sector de población especialmente importante, ya que es en la adolescencia cuando la mayor parte de los fumadores adquieren el hábito".

Respecto a las causas que pueden haber llevado a esta situación, Nebot no duda de que ha habido un cambio de actitud entre los más jóvenes. "Parece que los adolescentes ya no identifican fumar tabaco con la tan anhelada voluntad de transgredir ciertas normas", explicó.

Del tabaco al cannabis

Estos datos correspondientes a la ciudad de Barcelona se generalizarán en el futuro al resto de España. Al menos esto es lo que defienden sus autores, quienes consideran que la mayor parte de los fenómenos de carácter epidemiológico se notan en Barcelona "antes que en cualquier otro punto de España". Por este motivo confían en que dentro de un par de años el índice de fumadores entre los más jóvenes comenzará a bajar de forma generalizada.

Pero la nueva situación tiene una cara más oscura: muchos jóvenes han abandonado el tabaco para pasarse al cannabis. Y es que según otro informe, también de la Agencia de Salud Pública de Barcelona, el 22% de los chicos y chicas de 16 años son consumidores habituales de cannabis. Según el análisis, si en 2º de ESO el 7% de los alumnos -que entonces tienen entre 13 y 14 años- ya ha probado por lo menos algún porro, el porcentaje se dispara cuando llegan a los 16 años, edad en la que el 35% ya los ha fumado alguna vez y el 22% lo hace de forma habitual.

Sin embargo, el investigador Carles Ariza advierte de que no pueden compararse los consumos de tabaco y cannabis. "Los estudios suelen calificar de consumidores habituales de cannabis a personas que lo han probado durante el último mes, mientras que sólo se consideran consumidores habituales de tabaco si lo han fumado durante la última semana. Comparar ambas magnitudes se hace muy difícil".

A pesar de estas carencias, Ariza aventura que el consumo de cannabis entre los más jóvenes puede haberse triplicado desde el año 2000. "Hoy es mucho más fácil ver a un grupo de chicos fumando un porro después de clase, y en muchos casos son chicos que nunca han probado el tabaco, han ido directamente al cannabis". "Es algo que deberemos plantearnos muy en serio", afirma este investigador.