Agricultura estudia mejorar la oferta al sector, que amenaza con movilizaciones
Representantes de las organizaciones agrarias Asaja, UPA y COAG, junto con las cooperativas agrarias, reanudarán hoy con el Ministerio de Agricultura las negociaciones para lograr un acuerdo sobre las ayudas para paliar los efectos provocados por la subida de los precios del gasóleo. Mientras el Ministerio estudia mejorar su oferta de la pasada semana, Asaja y UPA han convocado una movilización conjunta en Madrid para el 20 de noviembre si antes no se logra un compromiso. Por su parte COAG también ha señalado su decisión de movilizarse aunque no ha decidido si lo hará con las otras organizaciones.
La ministra de Agricultura, Elena Espinosa, reconoció ayer en el Senado que probablemente hoy tampoco se llegará a un acuerdo definitivo sobre las ayudas y que será necesario seguir con las negociaciones en los próximos días. Los precios del gasóleo agrícola pasaron en el último año de 46 euros por 100 litros a más de 55 euros.
La semana pasada, el Gobierno hizo una primera propuesta de ayudas al sector agrario, que ofrecía una compensación de 100 millones de euros en base a cuatro céntimos de euro por litro de gasóleo consumido. Agricultura propuso abonar una cuarta parte como ayuda directa lineal y el resto en función de varias medidas como la reducción de módulos para la declaración de la renta.
Negociaciones
Frente a esa propuesta inicial, las organizaciones agrarias estiman el volumen de las pérdidas causadas por la subida de los precios de gasóleo y fertilizantes en más de 200 millones de euros. Fuentes del Ministerio de Agricultura no han rechazado la posibilidad de elevar hoy su oferta económica global y se muestran además partidarios de que la mayor parte de esos fondos vayan directamente sobre todo a los bolsillos de los pequeños y medianos agricultores que viven de la actividad agraria.
En las negociaciones para lograr un acuerdo sobre las ayudas por la subida de los precios del gasóleo, el sector plantea fundamentalmente tres peticiones. La primera, que se eleve el montante global de la ayuda ofertada inicialmente por la Administración de sólo cuatro céntimos de euro por litro. En medios agrarios se baraja una petición de ayuda no inferior a siete céntimos de euro por litro sobre el consumo real.
La segunda diferencia es que Agricultura cifra el consumo anual de gasóleo agrícola en 2.250 millones de litros, mientras que para el sector ese consumo podría superar los 4.000 millones de litros. Un tercer punto es la fórmula para la distribución de las ayudas. Las organizaciones agrarias quieren que sean en su mayor parte pagos directos a cada agricultor en función de su consumo. Agricultura planteaba en su primera oferta que una cuarta parte de la ayuda fuera como pago directo y el resto por rebaja de módulos a efectos de la declaración de la renta.
