Yabalia
Todos sabemos que las tragedias lo son menos si ocurren lejos, y dejan de serlo cuando son continuadas. Si en una de nuestras ciudades, un desastre causara la destrucción de buena parte de sus viviendas, dejando desamparados a cientos de ciudadanos, y ocasionando más de cien muertos, entre ellos decenas de niños, la conmoción sería considerable. Eso mismo es lo que ha ocurrido en el campo de refugiados palestino de Yabalia, y no ha sido precisamente un terremoto, sino un crimen planeado. Una tragedia más, unos pocos muertos más que añadir a la cuenta, unas pocas ruinas más. Otra dosis de veneno para aumentar, si eso es posible, el odio y la desesperación. Al crimen lo han llamado "Operación Días de Penitencia", y no se me ocurre qué clase de pecado puede merecer como penitencia la muerte de decenas de niños. El Gobierno de Israel es el responsable, y así seguirá mientras otros gobiernos, no menos responsables, callen, toleren, comprendan o incluso alienten. ¿Hasta cuándo?
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