Blanco y Duran piden que no se utilice a Cuba en la lucha política

Las relaciones políticas con Cuba no tienen que formar parte de la disputa de los partidos en España. Ésta es la petición que ayer hizo la dirección del PSOE, tras la reunión de su ejecutiva, y que hizo pública el secretario de Organización, José Blanco. Éste consideró "inadmisible" la actitud que las autoridades cubanas mantuvieron con un "parlamentario español". "Nos duele y nos preocupa, y por eso hemos protestado ante las autoridades cubanas, aunque no se puede aplicar a Cuba la misma política que durante la guerra fría", declaró Blanco.

Por su parte, el presidente de la Comisión de Exteriores del Congreso, el democristiano Josep Antoni Duran, ha convocado para mañana un almuerzo con los portavoces parlamentarios en esta comisión con el objetivo de acercar posiciones entre los distintos partidos sobre la política exterior española con el régimen cubano de Fidel Castro.

Duran intentará convencer a socialistas y populares de que dejen de utilizar las relaciones con Cuba como motivo para "pelearse" y consideren la política exterior como "política de Estado", tal como reclamó este fin de semana el ministro Miguel Ángel Moratinos a raíz de la expulsión del diputado popular Jorge Moragas de la isla, en donde iba a entrevistarse con miembros de la oposición a Castro.

Duran calificó de "inaceptable" la decisión de las autoridades castristas de prohibir la entrada a Moragas, secretario de relaciones internacionales del PP, pero al tiempo acusó al diputado de "haber encontrado lo que buscaba: el enfrentamiento".

Los disidentes, preocupados

El dirigente democristiano aseguró que los disidentes cubanos también ven con preocupación este enfrentamiento partidista en España, tras mantener ayer una conversación telefónica con el dirigente opositor Oswaldo Payá, promotor del Proyecto Varela, que persigue la democratización en Cuba. "Esto no ayuda al necesario diálogo que debe mantenerse con el régimen cubano", lamentó Duran.

"Cuando no se habla, no se avanza", señaló el líder socialcristiano, expresando de este modo su apoyo al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en su intento de restablecer los puentes de diálogo que el Ejecutivo del PP "cortocircuitó". "No puede ser que el PP intente presentar al PSOE como si prestara apoyo a una dictadura por pretender mantener contactos con el régimen castrista al que igual que ha hecho en numerosas ocasiones el presidente de la Xunta, Manuel Fraga", criticó.

El diputado de CiU Carles Campuzano recordó ayer que en julio pasado viajó a Cuba con visado turístico y pudo entrevistarse "sin hacer ostentación" con miembros de la disidencia cubana. Por su parte, el presidente de Esquerra Republicana de Catalunya, Josep Lluís Carod, advirtió de que el incidente con el diputado popular "no ha hecho ningún bien" a la disidencia cubana "ni a las relaciones entre España y Cuba".