Israel extiende la operación de represalia militar al norte del campo de Yabalia

El Ejército israelí extendió ayer la operación de represalia Días de Penitencia en el norte de la franja de Gaza a la población de Beit Lahiya, un par de kilómetros al norte de Yabalia, la ciudad que ha sido escenario desde el 29 de septiembre de los más duros ataques contra los milicianos palestinos. Unos 20 vehículos blindados se sumaron a la operación. Al menos dos supuestos miembros de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa y otro de la organización integrista Hamás murieron al ser alcanzados por dos misiles lanzados por la aviación israelí. Han perecido ya varias decenas de civiles, además de al menos 54 activistas, que a finales del mes pasado comenzaron a lanzar cohetes Qasam sobre la ciudad israelí de Sderot, a escasos kilómetros de la franja. Dos niños perdieron la vida.

Precisamente para impedir que esos cohetes puedan provocar víctimas, comenzó a funcionar ayer con éxito en Sderot un sistema de radar que alerta de la llegada de los proyectiles con 25 segundos de antelación para poder ponerse a resguardo. Desde que comenzó la operación del Ejército israelí, han muerto en el densamente poblado territorio ocupado de Gaza alrededor de 220 personas, más de un centenar de ellas en el norte de la franja.

Asimismo, las fuerzas de seguridad israelíes detuvieron en la madrugada de ayer en Hebrón (Cisjordania) al presunto comandante de Hamás en esta ciudad. Se entregó después de que fuera conminado a rendirse. La casa en la que dormía fue demolida por el Ejército. Imad al Kawasme está acusado de organizar el doble atentado suicida que mató el 31 de agosto a 16 personas que viajaban en dos autobuses en Beersheva, al sur de Israel.