Vidal Quadras

Se anuncia la constitución de una plataforma por varias organizaciones para mostrar su oposición "a la eurorregión catalana o piazos catalans" propuesta por Maragall. Participan en esta plataforma, por Baleares, la Plataforma Cívica en defensa de Sa Llengo Balear, por Aragón, la Federación de Asociaciones Culturales de Aragón Oriental, por la Comunidad Valenciana la denominada Coalición Valenciana y por Cataluña, la asociación Convivencia Cívica Catalana, creada por el eurodiputado del PP Aleix Vidal Quadras. La anunciada plataforma ha sido promovida, al parecer por Coalición Valenciana, una asociación-partido que pretende poner en marcha, otra vez, las manifestaciones y enfrentamientos vividos hace 25 años, cuando la llamada "batalla de Valencia". ¡Bendito sea Dios! Volvemos a las andadas. Pero estamos en democracia y todo el mundo tiene derecho a manifestarse en defensa de sus ideas. Se vuelve a enarbolar la bandera del anticatalanismo. ¡Qué le vamos a hacer! Esperemos que esta vez sea en tono más pacífico y no volvamos a la época en que una especie de kale borroka autóctona se dedicaba a poner bombas en el domicilio de algunos intelectuales, en librerías o en concentraciones en la plaza de toros. Se puede defender la "lengua valenciana" o "sa llengo balear", frente al catalán, sin tener que recurrir a la pólvora. Lo mismo que oponerse a los países catalanes, peligro que no acecha por ninguna parte. Pero si se quiere utilizar esto como maniqueo, a falta de razones de más peso para atraer al personal, pues adelante. Lo que a uno le sorprende es que en este movimiento figure Convivencia Cívica Catalana, impulsada por Vidal Quadras. Y que se utilice el nombre del eurodiputado del PP en la presentación ante la prensa de esta plataforma contra los "países catalanes", en defensa de la "lengua valenciana" y "sa llengo balear" frente al catalán y otras fruslerías. Uno no comulga con las ideas de Vidal Quadras, pero le considera persona intelectualmente responsable, incapaz de negar la unidad de la lengua catalana, por ejemplo, ni de patrocinar manifestaciones callejeras. Ahora bien, si él ha autorizado a que usen su nombre, nada que decir. Él sabrá.