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La Generalitat declara nulo el mayor proyecto urbanístico de Tarragona

La nueva normativa exige la celebración de un debate ciudadano

El Departamento de Política Territorial ha declarado "nulo de pleno derecho" todo el proceso de urbanización de la zona de Terres Cavades, en Tarragona, el mayor proyecto urbanístico de la ciudad, que preveía la construcción de casi 4.900 viviendas. El consistorio de la ciudad, dirigido por el convergente Joan Miquel Nadal, aprobó el proyecto de urbanización, salpicado de irregularidades, con los votos del entonces concejal de Urbanismo Àngel Fernández, que tiene intereses económicos y familiares vinculados con la reforma urbanística y, por tanto, por ley, no podía votar en este asunto. Los sucesivos votos de Fernández fueron imprescindibles para que el proyecto fuera pasando cada fase y al final fuera aprobado, ya que daban la mayoría al equipo de gobierno.

Ahora, el informe vinculante del Departamento de Política Territorial señala que han sido precisamente los votos del dimisionario edil Àngel Fernández los que han invalidado todo el proceso porque, en palabras del consejero de Política Territorial, Joaquim Nadal, fueron determinantes para la aprobación del proyecto de Terres Cavades.

A partir de ahora no bastará con una nueva aprobación del proyecto en el plenario municipal sin la participación y los votos del ex concejal Fernández. Si el Ayuntamiento de Tarragona quiere que se construyan viviendas en Terres Cavades deberá "comenzar de cero", aseguró ayer el consejero Joaquim Nadal, quien añadió que, además, el futuro proyecto deberá adaptarse a la nueva Ley de Urbanismo, lo cual supone la muerte definitiva del actual proyecto constructivo.Con la nueva Ley de Urbanismo en la mano, Terres Cavades sufrirá cambios sustanciales: las viviendas de protección oficial pasarían del 10% al 20%, y todo debería comenzar por un proceso de "debate ciudadano" -así lo prescribe la normativa para reformas urbanísticas de gran envergadura-, que no se ha llevado a cabo.

La oposición municipal (PSC, ERC e ICV) y algunos concejales del equipo de gobierno (CiU y PP) defenderán en este futuro debate que los vecinos que viven en la zona no sufran las consecuencias de un plan que, hasta su paralización de ayer, les obligaba a vender o a asumir la parte proporcional de los costes de urbanización de la zona.

La portavoz de la asociación vecinal, Patricia González, se mostraba ayer eufórica por haber logrado parar lo que calificó de "barbaridad" y se felicitó porque la resolución les permitirá participar en el futuro proyecto.

El alcalde de Tarragona, Joan Miquel Nadal, que afronta la mayor crisis de sus mandatos y que afecta a su credibilidad política, valoró la resolución de la Administración destacando que no se han cuestionado ni los metros cuadrados edificables ni las fases de construcción, lo cual le dio argumentos para afirmar que Política Territorial "no duda de la bondad del proyecto". El alcalde, que ha mantenido siempre que desconocía la participación económica de Fernández en Terres Cavades, aseguró que cualquier nueva votación se hará "con el máximo rigor".

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Nueva redacción

Josep Fèlix Ballesteros, portavoz municipal del PSC, emplazó ayer a Nadal a "volver a presentar el mismo plan si lo considera tan bueno" y aseguró que la resolución de Política Territorial es en la práctica un revés definitivo para Terres Cavades. "Las nuevas directrices del Gobierno catalán sobre Urbanismo no lo permitirían", señaló, posibilidad que también dejó entrever ayer Joaquim Nadal en la rueda de prensa.

El alcalde Nadal ya ha manifestado su intención de volver a impulsar el proyecto, algo que ayer también suscribió el portavoz parlamentario de CiU, Felip Puig, quien pidió al alcalde que cumpla a rajatabla lo que estipula Política Territorial y repita el procedimiento de Terres Cavades. Joan Miquel Nadal ha sufrido duras críticas desde su propio equipo de gobierno por esta crisis, y el secretario general de Convergència, Artur Mas, quiso ayer ratificar que la formación tiene "plena confianza" en el alcalde, y aseguró que sean cuales sean sus decisiones tendrán el total respaldo de la cúpula nacionalista.

Francesc Ricomà (PP), socio de gobierno de Nadal, lamentó la "deslealtad y traición" del concejal Fernández, ya que este escándalo ha provocado la paralización de un proyecto que "es válido".

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