Txabarri pide a Interior 50 'ertzainas' para crear una "policía foral"

El diputado general de Guipúzcoa, Joxe Joan González de Txabarri, ha solicitado al departamento de Interior del Gobierno vasco que 50 de los 500 nuevos ertzainas resultantes de la ampliación prevista en este cuerpo sean adscritos a la Diputación de Guipúzcoa "como policía foral administrativa". Txabarri anunció en el pleno de Política General de las Juntas Generales su deseo de contar con una dotación de agentes de la policía vasca para encargarse de las tareas de "inspección, transporte, medio ambiente, montes y aguas", como está previsto en la ley de Policía del País Vasco, apuntó.

Interior confirmó ayer la existencia de contactos para poner en marcha esta iniciativa con la nueva promoción de la Ertzaintza. Un portavoz de esta consejería aseguró que "se atenderá la demanda" de la Diputación "en cuanto se cubran las primeras necesidades" del cuerpo policial, cuales son las labores de "escoltas y seguridad ciudadana". Txabarri espera recibir una remesa de ertzainas en 2006.

El diputado general también manifestó ante la Cámara provincial la decisión de la Diputación de "intervenir de manera activa" en materia de vivienda, pese a ser ésta una competencia reservada al Gobierno y a los ayuntamientos. La institución foral va a "promocionar viviendas a precio tasado" dirigidas a segmentos de la población "excluidos de la VPO y del mercado libre". Para estas personas ofertará pisos "en régimen de derecho de superficie u otras fórmulas que permitan reducir el precio de las viviendas". Asimismo, agregó Txabarri, QUque facilitará el acceso a la vivienda a sectores como la juventud y la tercera edad, y aprobará incentivos fiscales para el alquiler.

En su intervención, Txabarri se detuvo en los principales proyectos de infraestructuras y de política social, cultural y medioambiental. Resaltó el carácter "humanista y solidario" que guiará su gestión e insistió en que seguirá actuando "desde el diálogo y el acuerdo". Al final de su discurso defendió el plan Ibarretxe como el instrumento que permitirá acabar con la "anormalidad" política de Euskadi y pidió a sus detractores que "no llamen al lobo".