Maragall inaugura el curso universitario prometiendo un proyecto de investigación "potente y competitivo"

El otoño trae consigo el arranque del curso académico. Las universidades catalanas tendrán durante el curso 2004-05 más de 220.000 alumnos, repartidos entre 12 universidades. Y la nueva temporada académica, la primera con Pasqual Maragall como cabeza de cartel en el acto de inauguración oficial, viene marcada por la puesta en marcha del plan piloto Bolonia, de adaptación al futuro espacio europeo de educación superior (EEES); la promesa de una mayor inversión por parte del Gobierno central, y el compromiso de potenciar la investigación por parte de la Generalitat.

En el acto celebrado ayer en la Universidad Pompeu Fabra (UPF), Pasqual Maragall refrendó ante los rectores su apuesta por la Universidad, "la tercera pata", junto con la empresa y la Administración, que debe liderar el progreso de Cataluña. El presidente de la Generalitat, que fue recibido con pancartas reivindicativas portadas por delegados de CC OO, un grupo de la Coordinadora d'Estudiants dels Països Catalans (CEPC) y varios representantes del personal docente e investigador contratado, subrayó que es necesario "hacer una apuesta por una investigación más potente y competitiva". Maragall afirmó que el proyecto para una nueva política de investigación que prepara su Gobierno "será ambicioso", ya que supondrá un esfuerzo inversor que alcanzará el 2% del PIB en esta legislatura, hasta llegar al 3% del PIB en 2010. También apostó por la puesta en marcha de una eurorregión académica, lo que incrementaría la influencia del sistema universitario catalán más allá de sus fronteras.

La rectora de la UPF, Rosa Virós, advirtió de que el éxito del EEES vendrá condicionado por el hecho de que "el profesorado crea en esta reforma" y abogó por el buen uso de los fondos públicos que reciben las universidades públicas.

Juan Carlos Izpisúa, futuro responsable del nuevo Instituto de Medicina Regenerativa de Barcelona, fue el encargado de pronunciar la lección inaugural, titulada Desarrollo embrionario, ingeniería tisular y células madre: el futuro de la medicina regenerativa. En opinión de Izpisúa, de la misma forma que la investigación en el campo de las células madre debe abordarse desde una óptica multidisciplinar, el reto de la Universidad futura es formar estudiantes con capacidades multidisciplinares.