UGT y el alcalde de Elche culpan a los gobiernos del PP del hundimiento del sector del calzado

Rafael Recuenco, secretario general de UGT-PV, y Diego Macià, alcalde socialista de Elche, achacaron ayer el hundimiento del sector del calzado a la falta de iniciativa del Consell para prevenir la crisis de la industria tradicional. El sindicalista y el alcalde expresaron esa unánime crítica una semana después del asalto a naves de empresarios chinos en el polígono Carrús.

El Consell, a través del secretario Autonómico de Empresa, Pedro Coca, rechazó la acusación y resaltó el "esfuerzo" de la Generalitat para impulsar los sectores tradicionales.

El líder de UGT y el alcalde ilicitano coincidieron en sus críticas a la anterior Administración central, en manos del PP, y los gobiernos populares del Consell acerca de su "inhibición" para prevenir la crisis del calzado en unas jornadas monográficas sobre el sector, celebradas ayer en Elche. El encuentro, una iniciativa del sindicato, contó con la presencia del máximo dirigente de los fabricantes de calzado, Rafael Calvo. Empresarios y sindicalistas evidenciaron sus diferencias en los debates y explicitaron su distanciamiento compareciendo por separado ante los medios de comunicación. Los debates también estuvieron matizados por la manifestación espontánea contra las importaciones chinas.

El alcalde fue contundente en su ataque al Consell ante la crisis del calzado: "Es necesario hacer una crítica a la inhibición, a la ausencia en los últimos años por parte de los diferentes gobierno del PP de una política activa industrial y una falta de implicación en ese proceso de reconversión del sector". En la misma línea se expresó el secretario general de UGT. Recuenco lamentó la ausencia de representantes del Consell en las jornadas, "pese a que han sido invitado", matizó. Para el líder ugetista, la crisis del calzado en particular y del sector de la manufacturas en general es una consecuencia de la "nula" política industrial del Consell. "Se han limitado siempre a negar que había crisis", argumentó.

Toni Ferrer, secretario confederal de acción sindical de UGT, destacó que el futuro del calzado pasa por ayudas concretas a la industria, "ayudas las vamos a solicitar al ministro de Economía". El sindicalista rechazó la fórmula de abaratar costes laborales, "ya que ello ahondaría el clandestinaje". Sobre la competencia amarilla, Ferrer subrayó que la respuesta es ofrecer productos diferenciados.

El presidente de la patronal también comulgó con esta teoría del sindicalista: "China no es una amenaza, si no una oportunidad". Calvo esgrimió el protagonismo de los empresarios para superar la crisis y solicitó ayudas a la Administración para la promoción y formación y un rigurosos control aduanero de las importaciones. Calvo lamentó los incidentes del jueves y redujo la manifestación a un problema de orden público, "que ha dañado la imagen del sector". El presidente de la patronal descartó que se pueda reproducir en otras poblaciones zapateras.

El alcalde aseguró no tener constancia de que esta tarde pueda haber otra manifestación en el Carrús contra la competencia China. "Son rumores, y estamos tomando las necesarias medidas preventivas de seguridad", dijo.