El curso arranca en un contexto expectante por los cambios políticos en Madrid y Valencia

Los platos fuertes de la inauguración del curso universitario en la Comunidad Valenciana se servirán esta semana. El primero en Alicante, en cuya universidad Rodríguez Zapatero, Francisco Camps y Salvador Ordóñez, junto al rector en funciones Miguel Louis, abren el jueves el nuevo periodo académico. Al día siguiente, el nuevo consejero de Empresa, Ciencia y Universidad, Justo Nieto, compartirá con el rector Francisco Tomás, ceremonia inaugural en la Universitat de València. Atención a los discursos de esas solemnes sesiones y la del día 6 de octubre en la Politécnica, que reclaman anuncios de relevancia. Sesiones cargadas a priori de contenido que reflejan de forma plástica la encrucijada política y académica desde la que inician el curso las universidades valencianas.

La presencia del nuevo consejero autonómico y del secretario de Estado de Universidades e Investigación en estos actos subraya, al mismo tiempo, las vacantes que han dejado en sus respectivas universidades, la Politécnica y la de Alicante y, en consecuencia el hecho de que ambas arrancan el curso con direcciones interinas y abocadas a una próxima convocatoria electoral.

El cambio en el Consell supone cambio estructural estratégico que funde en una misma consejería ciencia, formación superior y empresa. El cambio de Gobierno en Madrid, por el contrario, renuncia al Ministerio de Ciencia y Tecnología y reparte sus competencias entre otros departamentos. El giro político estatal "supone medidas legislativas no previstas", como recuerda el rector Tomás y hay, además, pendientes asuntos importantes, como el esperado Estatuto del Profesorado, que tendrá que definir la dedicación docente, gestora e investigadora, o los decretos que regulan los estudios de grado y postgrado. Éstos cambiarán la estructura de las enseñanzas universitarias para converger con Europa, tarea en la que todas las universidades están más o menos enfrascadas. En este ámbito, Nieto avanzaba el jueves que "va a poner en marcha las iniciativas oportunas para que las universidades valencianas se incorporen cuanto antes al Espacio Europeo de Educación Superior". Y el Camps recordaba, como el curso pasado, el compromiso sobre una Ley de Universidades.

En este contexto, el rector de la mayor y más antigua de las universidades valencianas resume la situación en este comienzo de curso como "expectante" ante los cambios políticos generados en Madrid y Valencia, a la espera de que se despejen incógnitas.

Hay también una financiera. Extinto el último Plan de Financiación y pendiente acuerdo y firma el documento que las universidades públicas presentaron a la Generalitat para definir el marco de los dos próximos años, este es el primer curso desde 1995 que inauguran sin cobertura de plan de financiación. Paradójicamente, es responsabilidad del consejero Justo Nieto dar respuesta a un documento por el que hace pocos meses apostó como rector. Su antecesor en materia universitaria, González Pons, anunció firma para este mes de septiembre. Todos esperan que sea lo más pronto posible para abordar los presupuestos del 2005.

Por otro lado, a la vez que la mayoría de los gestores universitarios reconocen un descenso importante en la matrícula de alumnos de nuevo ingreso, y por tanto de la demanda, crece la oferta con la puesta en marcha de la séptima universidad valenciana, la San Vicente Mártir, que pone en juego este curso tres nuevas titulaciones junto a las que impartía como centro adscrito Edetania. Las 17 titulaciones autorizadas para las demás universidades en julio no se ofertan aún, pendientes la mayoría de largos trámites de homologación, si bien es muy probable que se anuncie la implantación de alguna para este mismo curso.