El Gobierno aprueba el envío de 200 infantes de marina a Haití
Los helicópteros enviados a Afganistán atenderán al contingente español
El Consejo de Ministros aprobó ayer el envío de 200 infantes de marina a Haití, que se unirán al contingente marroquí, a instancias de la Misión de Estabilización de Naciones Unidas en este país centroamericano. También decidió que la Unidad de Helicópteros destinada en Afganistán se dedique prioritariamente a atender al contingente español, por lo que tendrá su sede en Mazar-i-Sharif, en lugar de Kabul, la capital.
La previsión del Gobierno es que el contingente español llegue a Haití en la segunda quincena del próximo mes de octubre para llevar a cabo una misión de pacificación. El contingente español iba a estar compuesto, inicialmente, por miembros de la Guardia Civil, pero se cambió la decisión inicial por petición de la Misión de Estabilización de la ONU (Minustah).
Los 200 infantes de marina se unirán a los 150 militares marroquíes con los que formarán un batallón conjunto. El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero había aprobado el envío de una misión de paz a Haití en el Consejo de Ministros del 2 de julio.
El mismo Consejo de Ministros decidió prorrogar la labor que desempeñan las fuerzas armadas españolas en Afganistán. La reunión del Consejo de Ministros de ayer decidió que la unidad de helicópteros allí destinada se dedique a atender de manera prioritaria al contingente español durante el proceso electoral previsto para el próximo mes.
Fuerza de Gendarmería
El Consejo de Ministros acordó también la creación de una Fuerza de Gendarmería Europea, surgida de una propuesta realizada por Francia en octubre de 2003 a los demás países europeos que cuentan con fuerzas policiales de carácter militar. Dichos países son Francia, Holanda, Italia y Portugal, además de España. Su pretensión es llevar a cabo todo tipo de misiones policiales durante las operaciones de gestión de crisis.
La fuerza está abierta a otros estados pertenecientes a la Unión Europea, así como a candidatos que vayan a ingresar y posean fuerzas policiales de carácter militar que puedan ser puestas al servicio de otras organizaciones internacionales como Naciones Unidas, OTAN u OSCE.
La coordinación político-militar entre los Estados participantes la garantiza un Comité Interministerial de alto nivel, en el que España está representada por miembros de los ministerios de Asuntos Exteriores y Cooperación, Interior y Defensa.
La Fuerza de Gendarmería Europea tendrá un cuartel general multinacional, modular y proyectable en Vicenza (Italia). El cuartel general estará al mando del Comandante de la Fuerza de Gendarmería Europea y sus puestos clave serán rotatorios entre los países miembros. España tendrá dos oficiales y tres suboficiales. No tendrá fuerzas asignadas en permanencia, aunque deberá ser capaz de reaccionar en 30 días, con 800 personas, aproximadamente.
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