De Vuelta

Vaya día, vaya día que llevo, esto acaba de empezar y ya estoy de Vuelta. Digamos que el día no ha empezado bien, y eso que el sol lucía alegre cuando he corrido la ventana de la habitación. Pero ya en el desayuno me he encontrado de sopetón con la foto en portada de los niños muertos en el asalto al colegio ruso, y se me ha volteado el cuerpo para todo el día, como supongo yo que les habra pasado a muchos otros. Tampoco ha ayudado nada el seguir pasando páginas que te introducían aún más en la tragedia, pero así es la realidad y mirar para otro lado nada cambia -bueno sí, ayuda a que la ignorancia se arraigue aún más-, y todo lo demás es cuento.

Bien es cierto que ya estaba de vuelta también hace un par de días. Y es que vamos a ver cómo lo explico. Yo llego aquí a correr la Vuelta. Me he entrenado en mi casa, me he cuidado para llegar aquí en las mejores condiciones dentro de lo posible. En fín, que he hecho mitrabajo se supone que lo mejor que sé hacerlo. El primer trámite que tengo que pasar para cumplir las reglas es poner el brazo ante la enfermera para que extraiga de mi cuerpo 15 centímetros cúbicos de un líquido rojo y viscoso que serán mi radiografía para los señores de la UCI.

Para el Gobierno soy un DNI; para la organización, un dorsal, y para estos señores, elcontenido de esa jeringuilla. Me gustaría explicarle a la enfermera que yo soy algo más que el resultado que extraigan de ahí, sea el que sea, que detrás de todo eso hay ilusiones,sentimientos, sufrimientos compartidos, pasiones, etcétera, pero a las siete de la mañana no fluyen las palabras, y además, si lo hiciera, lo más lógico sería que me contestase: ¡ya!, ¡y a mí que me cuentas!

Me cuentan lo que pueden hacer con esa sangre. La pueden congelar para que la tecnología de un futuro descubra en ella datos que ahora no podemos conocer. Esto hace volar mi imaginación, para qué lo voy a negar, quizá dentro de cien años descubran que soy fruto de una unión fortuita de un miembro de una civilización superior convertido en mi padre con un espécimen de la raza humana, lo que yo siempre he llamado mi madre. ¡Y yo aquí sin enterarme!.

En fin, ya lo siento, mañana les hablaré de ciclismo, porque hoy es que llevo un día que... bueno, si ya lo he dicho al principio, que estoy de Vuelta.

Pedro Horrillo es corredor del Quick Step