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La alternativa vasquista al soberanismo del 'plan Ibarretxe'

Luis R. Aizpeolea

La propuesta de reforma del Estatuto de Gernika que elabora el PSE será uno de los ejes de su campaña de las elecciones vascas del próximo mes de mayo, y será, por tanto, la alternativa socialista al plan Ibarretxe, promovido por el Gobierno tripartito, convertido en la referencia política del nacionalismo vasco. Pero dada la diferente circunstancia de sus promotores ambas propuestas seguirán caminos distintos.

El plan Ibarretxe, antes de servir como base de la campaña de las elecciones autonómicas de mayo del próximo año del candidato del PNV, el lehendakari Juan José Ibarretxe, será votado en el Parlamento vasco, previsiblemente, antes de fin de año. Además, por su procedimiento y contenido, el plan Ibarretxe no es una reforma del Estatuto. Es un Estatuto nuevo que modifica el modelo de Estado y la Constitución, al proponer la fórmula confederal de relación entre los gobiernos de Madrid y Vitoria y al reconocer la soberanía del pueblo vasco.

No es ésa la vocación de la propuesta de reforma del PSE. Los socialistas vascos pretenden que su texto sirva como un elemento de debate, que pondrán sobre la mesa en una futura ponencia parlamentaria de la que debe salir un Estatuto de Gernika reformado. La revisión que proponen no supone un cambio del modelo de Estado sino simplemente una mejora de su funcionamiento.

La reforma del PSE, con el lema "Más Estatuto", recupera la línea política del socialismo vasquista que este partido tuvo como guía hace 10 años, siendo su secretario general Ramón Jáuregui, frente al soberanismo del PNV y el españolismo del PP. Hace 10 años fracasó en plena etapa de escándalos y decadencia del Gobierno del PSOE.

La incógnita de SA

Los socialistas vascos quitan hierro a la votación del plan Ibarretxe en el Parlamento vasco, sometido a la incógnita de la posición que adopte Sozialista Abertzaleak (SA), grupo heredero de la ilegalizada Batasuna, pues el tripartito vasco (PNV, Eusko Alkartasuna y Ezker Batua-Izquierda Unida) no tiene mayoría parlamentaria.

El ex dirigente del PNV y autor del texto de reforma del Estatuto del PSE, Emilio Guevara, dice: "Da igual que el plan Ibarretxe salga o no salga aprobado en el Parlamento vasco porque, aunque saliera, la última palabra la tienen las Cortes españolas y allí no saldrá. El PNV se tiene que acostumbrar a respetar las leyes y en esta cuestión, como tienen competencia las Cortes, tendrá que respetar lo que decidan".

Guevara se remite a la historia para vaticinar lo que hará el PNV con el plan Ibarretxe. "En la Segunda República, el PNV presentó un Estatuto, el de Estella, que proponía, entre otras cosas, relaciones privilegiadas entre el País Vasco y el Vaticano. Las Cortes españolas lo rechazaron y el PNV tuvo que acatarlo. ¿Qué hizo el PNV? Elaborar otro Estatuto. Ahora pasará lo mismo".

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