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Las langostas invaden ya el norte de Nigeria

La plaga de langosta que arrasa el Sahel y el noroeste africano alcanza ya el norte de Nigeria y puede agravarse antes de septiembre, dado que una nueva generación de estos insectos está a punto de aparecer. Jacques Diuf, director general de la FAO (Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) insistió ayer en que frenar la plaga exige una ayuda internacional de 100 millones de dólares. El pasado día 6, cuando los enjambres devastaron la capital de Mauritania, Nuakchot, la FAO estimaba que serían necesarios 58 millones para fumigaciones. La situación se ha agravado, recalcó Diuf.

"Un montón de granjas han sido devoradas", señala un portavoz del estado nigeriano de Zamfara. En el vecino estado de Sokoto, se ha luchado en vano con aviones toda una semana contra los insectos.

En Mauritania un 80% de la cosecha ha sido destruida, y un millón de personas podría tener que ser alimentado desde el aire. El desastre afecta también a Níger, Mali, Senegal, Gambia y, hacia el este, Chad. Es la peor plaga desde 1987, cuando se llegaron a avistar ejemplares en Roma e India y fueron precisos 600 millones de dólares y luchar durante cinco meses.

La presente plaga ha sido detectada incluso en lugares poco habituales, como las playas del archipiélago de Cabo Verde. Y los expertos de la FAO temen que pueda presentarse en la región de Darfur (oeste de Sudán), donde las milicias auspiciadas por el Gobierno proislamista de Jartum atacan y desplazan a la población.

El problema añadido es que las abundantes lluvias registradas el año pasado en el Sahel y posteriormente en África occidental han creado condiciones ecológicas muy favorables a la proliferación de la langosta.

Este insecto puede llegar a desplazarse en un solo día hasta 130 kilómetros en enjambres que pueden estar formados por 80 millones de ejemplares por kilómetro cuadrado. Los insectos llegan a medir 15 centímetros y son capaces de devorar diariamente alimentos en cantidad equivalente a su propio peso.

Un granjero de Shinkafi (Estado de Zamfara, norte de Nigeria) muestra el pasado sábado dos langostas capturadas en su campo devastado por la plaga.
Un granjero de Shinkafi (Estado de Zamfara, norte de Nigeria) muestra el pasado sábado dos langostas capturadas en su campo devastado por la plaga.AP

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