Sanidad decreta en Castellón el nivel rojo de alerta por altas temperaturas

La Consejería de Sanidad ha activado el nivel 2 o rojo de alerta en Castellón ante la previsión de un fuerte incremento de las temperaturas durante los próximos días, según Instituto Nacional de Meteorología. El ascenso podría prolongarse de tres o cinco jornadas. Además, según el centro territorial del instituto, el viento de poniente entrará de nuevo, a partir de hoy, afectando sobre todo al litoral y a las zonas más bajas de la Comunidad Valenciana.

La temperatura podría subir entre tres y cinco grados, ya que se prevé, además, la entrada de vientos de África. La provincia de Alicante continúa en nivel 0 o verde y en la de Valencia se mantiene el nivel 1 o amarillo. En cualquier caso, el Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM) no prevé que en los próximos días se superen los umbrales legales de alerta a la población en lo que a niveles de ozono se refiere.

La entrada de viento de poniente, que la pasada semana sopló durante cuatro días, coincidirá, a partir de hoy, con la entrada de vientos africanos, lo que provocará que, a la sensación de calor que conlleva el poniente, se una un incremento real de las temperaturas. Las previsiones apuntan, sobre todo, al litoral y a las zonas bajas. La alerta de incendios se activa de nuevo.

Con el decreto del nivel rojo en Castellón, Sanidad recomienda una especial atención a niños menores de 5 años, personas mayores de 65 años, personas muy obesas, personas con una actividad que requiere bastante esfuerzo físico y en lugares con fuentes de calor, y personas enfermas o que tomen determinados medicamentos, que se encuentren en la provincia. Además, los directores de los centros de salud de las áreas afectadas ofrecerán información y recomendaciones a los ayuntamientos sobre actividades en locales en los que se prevea mucha concurrencia, y que supongan un incremento del riesgo.

Las medidas generales de protección recomendadas se centran en tomar abundantes líquidos, aportar sales minerales al cuerpo, comer pequeñas cantidades de comida, usar ropa adecuada, usar protección para los rayos solares, evitar esfuerzos físicos innecesarios, utilizar si es posible el aire acondicionado, planear las actividades en horas de menor temperatura, vigilar a niños y ancianos, y no dejar a personas de los grupos de riesgo en el interior de los coches.