La secuestrada en Getxo estuvo en dos casas vigilada por cuatro hombres

Los captores de Olga Novo, la mujer de un empresario de Getxo (Vizcaya) que fue hallada en Oña (Burgos) tras estar 10 horas secuestrada el miércoles, actuaron a cara descubierta y retuvieron a su víctima en dos casas diferentes, según fuentes de la investigación. La mujer ha declarado que, cuando la dejaron esposada en una furgoneta, un hombre al que el resto llamaba "jefe" le dijo que si volvía a verlos por la calle "no dijera nada a nadie". La mujer fue trasladada en dos vehículos distintos, uno para llevarla desde Getxo a Oña y otro para ir de una casa a otra, además de la furgoneta donde fue abandonada esposada al volante.

El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, se refirió ayer en Santander a la nota de la Ertzaintza en la que mostraba su malestar porque a sus agentes se les impidió asistir a la declaración de Novo ante la Guardia Civil. Explicó que fue la juez del caso quien "prohibió expresamente la presencia de la Policía Autonóma vasca y ordenó que la copia de la declaración la pidieran directamente al juzgado". Camacho dijo que conversó anteanoche con el viceconsejero vasco de Interior, Mikel Legarda, que le dijo que no había ningún problema y que pedirían la copia. "No hay ningún problema en relación a la colaboración", añadió.