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INCENDIO DE RIOTINTO

El fuego amenaza las economías rurales de 48.000 vecinos de Sevilla y Huelva

Más de 12.000 peonadas ligadas a la extracción de corcho peligran en Berrocal y Aznalcóllar

El corcho, la caza, la apicultura, la industria papelera y el turismo rural son los sectores más perjudicados por el incendio que afectó a 13 municipios de Sevilla y Huelva, donde residen 48.000 personas. Los criadores de abejas cifran las pérdidas en más de cinco millones; la Federación Andaluza de Caza, habla de 420.000 euros; y, sólo en Aznalcóllar y Berrocal, peligran más de 12.000 peonadas generadas por la extracción de corcho. Al margen de otras inversiones que están en estudio, la Junta aprobará en nueve días una partida de emergencia de 38 millones de euros. Mientras, continúa la pugna política. La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, negó que la Junta renunciara a fondos forestales, como le acusó el PP.

El corcho, que se extrae del alcornoque, se ha convertido en el mártir de la historia del gran incendio de Riotinto, que quemó hace dos semanas más de 26.000 hectáreas. Sólo en Aznalcóllar (Sevilla), la alcaldía calcula que el fuego ha dañado el 65% del término municipal. La agrupación local de Comisiones Obreras (CC OO) calcula que están afectados 829.000 kilos de corcho, que generan cada temporada entre 11.000 y 12.000 peonadas y dan empleo directo a 60 personas. CC OO ve peligrar estos trabajos para las próximas campañas. En Berrocal (Huelva), la alcaldía estima que entre 8.000 y 9.000 hectáreas de la superficie del municipio han ardido. El 90% de la masa forestal estaba formada por encinas y alcornoques. Esto supone unas pérdidas de unos 860.000 euros y la desaparición de unas 1.000 peonadas dedicadas exclusivamente a la saca del corcho. "A esto hay que unir el transporte, los arrieros, los apiladores, el mantenimiento... Es incalculable", afirma Juan Jesús Bermejo, el alcalde.

Otros sectores productivos han visto como las llamas destruían sus materias primas. Según la Consejería de Medio Ambiente, el 68% de la masa forestal arrasada estaba formada por eucaliptos. De esta, un 20% estaba en régimen de explotación. ENCE (Empresa Nacional de Celulosa de España) estima que unas 3.000 hectáreas de sus explotaciones de eucalipto han ardido. Manuel Pardo, responsable de Ibersilva, una de las empresas que conforman ENCE, calcula que sólo 700 hectáreas de las 3.000 afectadas podrán tener una salida al mercado, "pero jamás como pasta de papel (...) Se podrán utilizar como biomasa". A estas hectáreas hay que sumar 1.000 más de la empresa Einsa.

En los montes arrasados también había cotos. El presidente de la Federación Andaluza de Caza, Carlos Astorga, estima que se han perdido más de 420.000 euros. "La más afectada es la caza mayor", cuenta Astorga, quien calcula que han muerto entre 900 y 1.000 ciervos, entre 500 y 600 jabalíes y unos 7.500 conejos y perdices: "Es una desgracia también para los peones que se utilizaban, los restaurantes, los hoteles..."

El gerente de la RAAR (Red Andaluza de Alojamientos Rurales), Klaus Ehrlich, considera imposible dar un número exacto de las perdidas del sector del turismo rural: "Cualquier cifra que puedan decir se la van a inventar".

En la zona calcinada, existen entre 20 y 30 establecimientos turísticos oficiales que, en esta época del año, están en temporada baja. "Los efectos se notarán en otoño", afirma Klaus Ehrlich, gerente de la RAAR.

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Los apicultores sí han podido cuantificar los daños. Según la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganadores (COAG) se han perdido 5.330.000 euros. Alrededor de 3.500 colmenas han ardido y más de 24.000 ya no tienen sus asentamientos en la sierra. Los criadores de abejas de la zona ya le han pedido a la Junta que les proporcione otro lugar en el que puedan establecer sus colmenas.

Más difícil de contabilizar es el caso de la ganadería. Según explica Manuel Izquierdo, responsable de COAG en Sevilla, las fincas quemadas no eran grandes explotaciones y, normalmente, se trataba de familias que tenían una piara de cerdos que le proporcionaba un sobresueldo. María Josefa Rubiano, alcaldesa de El Madroño (Sevilla), afirma que en la mayoría de las fincas "no se vivía de una sola cosa; se cultivaba semilla, había alcornoques, encinas, huertos y cerdos, que ya no tienen bellotas para comer".

Inversiones y plan de empleo

Ante esta situación, y al margen de los 38 millones de euros que se aprobarán en nueve días para trabajos de regeneración, dentro de un plan de emergencia, los consejeros de la Presidencia, Gaspar Zarrías, y de Empleo, Antonio Fernández, se reúnen hoy en Huelva con los alcaldes de los municipios de esta provincia que han sido afectados por el incendio de la pasada semana. Según informó la Junta en un comunicado, a la reunión han sido convocados los alcaldes de Escacena del Campo, Nerva, Paterna del Campo, Zalamea la Real, Minas de Riotinto, El Campillo y Berrocal. En este encuentro se analizarán las medidas en materia de empleo que se aplicarán en estas localidades, afectadas en mayor o menor medida por el siniestro.

Mientras los ayuntamientos recaban más datos sobre los efectos del fuego, continúa la batalla política. La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, afirmó ayer a Efe que el PP "miente clarísimamente" al denunciar que la Junta no firmó un convenio que hubiera supuesto recibir 1.025 millones de euros para cuidado y limpieza de los bosques. "En cierta manera [el PP] también se siente responsable de lo ocurrido", señaló para explicar las acusaciones.

Coves reclamó a los populares que expliquen en qué partida presupuestaria figuran los 1.025 millones que Andalucía habría dejado de recibir para el cuidado de los bosques y que "enseñe el convenio que ellos dicen que la Junta se negó a firmar".

La titular de Medio Ambiente dijo que "es imposible" que Andalucía hubiera podido recibir esa cantidad porque el Programa Operativo para Andalucía 2000-2006 recoge 900 millones de euros. Señaló que el Ministerio canalizó parte de ese dinero a través de las confederaciones "y, como estaban violando claramente las competencias autonómicas, lo destinaron a rehabilitar iglesias y construir polideportivos".

La denuncia del PP podría obedecer, según la consejera, a que esta formación intenta "esconder su responsabilidad en algunas actuaciones", como no trasladar fondos forestales que le correspondían a Andalucía o que la Brigada de Incendios Forestales (BRIF) que estaba en la Pata del Caballo se haya enviado a otro lugar de Andalucía "en una decisión unilateral del Gobierno del PP".

"Que nos expliquen dónde está ese dinero y por qué no ha llegado a Andalucía", pidió Coves, quien recordó que hubo distintas iniciativas en el Parlamento solicitando esa partida, por lo que señaló que esta actuación "es el colmo de las desvergüenza política".

Subrayó además la consejera que, pese a todo, "Andalucía ha hecho un esfuerzo tremendo en inversiones", ya que sólo este año se han destinado 92 millones de euros para trabajos en fincas públicas y ayudas a particulares.

El PP denunció el sábado que la Junta fue la "única" comunidad que no firmó, por su política de "confrontación", un convenio con el anterior Gobierno para reforestación, limpieza y cuidado de los montes, una decisión con la que, según los populares, dejó de percibir desde 2002 más de 1.000 millones de euros.

El secretario general del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido, aseguró que este tipo de convenio fue rubricado en 2002 entre la anterior Administración central y el resto de comunidades, salvo Andalucía. "De aquellos polvos vienen estos lodos", aseveró Zoido en relación a esta decisión y a las consecuencias del incendio de Riotinto.

Zona de Riotinto quemada por el incendio de la pasada semana.
Zona de Riotinto quemada por el incendio de la pasada semana.LOGAN

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