_
_
_
_

Una localidad de Jaén intenta atraer por carta a las empresas catalanas

La Carolina promete "las mejores ayudas que existen en España"

Claudi Pérez

El alcalde de la localidad jienense de La Carolina, Ramón Palacios (PP), ha enviado en los últimos meses cientos de cartas oficiales a empresas instaladas en Cataluña para atraer inversiones, con la promesa de fuertes subvenciones. La Carolina ofrece "las mejores [ayudas] que existen actualmente en España", según la misiva, como préstamos sin intereses, viviendas para el personal técnico y bajos costes salariales.

Suelo prácticamente gratuito, préstamos sin interés, vivienda para los trabajadores y costes salariales "notablemente más competitivos" que los de otras zonas del país. Ése es el anzuelo de La Carolina para captar empresas ya instaladas en otras áreas. Con las deslocalizaciones a la orden del día, muchos otros municipios españoles ofrecen condiciones parecidas para robar inversiones a las zonas más industrializadas. La diferencia es que el alcalde de La Carolina, Ramón Palacios (PP), lo hace sin ambages: con membrete del Ayuntamiento y una carta que detalla todas las ayudas y que se envía a empresas ya instaladas en otras zonas industriales, para sorpresa de empresarios, patronales y administraciones.

La misiva detalla un buen número de ayudas, que se autodefinen como "las mejores que existen actualmente en España" y que en ningún caso "son incompatibles entre sí". El alcalde de La Carolina es todo un personaje: senador por Jaén, sigue pendiente de juicio en el Supremo por un supuesto delito electoral, tras la denuncia de un concejal socialista que en 1999 le acusó de utilizar recursos públicos para la organización de su campaña electoral. A sus 83 años, Palacios no ha dudado en vincular el "milagro industrial" de La Carolina -más de 100 empresas se ubican en los tres polígonos industriales de la localidad- a las ayudas otorgadas por el Gobierno de José María Aznar. Aunque con el cambio de Gobierno, Palacios tampoco se arredra: ahí están los centenares de cartas enviadas a empresas "catalanas, pero también italianas, estadounidenses y francesas", explica Antonio Molero, responsable de promoción y empleo de La Carolina. "Buscamos empresas que quieran ampliar su capacidad de producción o instalarse en otro sitio", confiesa Molero.

"Competencia cainita"

Una de las últimas empresas que ha recibido la invitación de Palacios -que invita "a comprobar in situ las ventajas" que ofrece La Carolina"- es una compañía instalada desde hace años en Cataluña. "El único objetivo es dar a conocer nuestra oferta", justifica Molero. La Administración catalana tiene otra interpretación. "Cataluña no puede ofrecer suelo gratis ni muchas otras ayudas porque no cuenta con el colchón presupuestario de los fondos europeos", explican fuentes del Gobierno catalán. "Pero es evidente que hay una competencia cainita por las empresas", según las mismas fuentes.

Para Joaquín Trigo, director ejecutivo de la patronal Fomento, se trata de un tipo de competencia "muy venenoso, que cuando se dirige a multinacionales puede incluso dañar la imagen del país", y de un método para atraer inversiones "discutible".

La competencia se hace, normalmente, con la menor publicidad posible. En 2001, el Ejecutivo catalán anunció una fuerte inversión de Inditex -más de 80 millones de euros y la creación de 750 empleos- en Girona. A la postre, la Generalitat lanzó demasiado pronto las campanas al vuelo y el grupo textil gallego optó por Zaragoza. ¿Por qué? Suelo barato y fuertes ayudas a la creación de empleo "de acuerdo con la normativa comunitaria", como se encargaron de resaltar después el Gobierno aragonés y la propia empresa.

Palacios utiliza una táctica parecida al glosar las virtudes de La Carolina: grandes ayudas en virtud del "protocolo especial de colaboración" alcanzado con el Gobierno del PP. Pero hay también cosecha propia. La arteria principal de uno de los polígonos industriales se llama avenida del Ministro Josep Piqué. Cuando era titular de Industria, Piqué -hijo adoptivo de la localidad, como varios ex ministros del PP- aprobó una inversión millonaria para La Carolina. Todo vale.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Claudi Pérez
Director adjunto de EL PAÍS. Excorresponsal político y económico, exredactor jefe de política nacional, excorresponsal en Bruselas durante toda la crisis del euro y anteriormente especialista en asuntos económicos internacionales. Premio Salvador de Madariaga. Madrid, y antes Bruselas, y aún antes Barcelona.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_