Todos los cascos antiguos de los barrios de Barcelona serán áreas de rehabilitación

El Ayuntamiento de Barcelona apuesta decididamente por la rehabilitación para mejorar las viviendas vacías y sacarlas al mercado. Los responsables municipales pretenden alcanzar los 32.000 pisos reformados en 2010, pero carecen de todas las competencias necesarias para hacerlo. Es el caso de la declaración de áreas de rehabilitación integral, que corresponde al Gobierno y se decide mediante convenios con la Generalitat. Una de las propuestas del Ayuntamiento es ampliar las cuatro actuales áreas de rehabilitación a un total de 24, que incluirían los núcleos antiguos de todos los distritos.

La rehabilitación masiva de edificios es una de las medidas que permitirían desarrollar el Plan de Vivienda de Barcelona 2004-2010, aprobado por el consistorio el pasado mes de mayo. El plan insta a las administraciones central y autonómica a invertir 270 millones de euros para alcanzar la cifra de 32.000 viviendas rehabilitadas en 2010. Esta inyección económica significaría cuadruplicar el ritmo que permiten las ayudas actuales, según explicó ayer el Gobierno municipal en el último pleno antes de las vacaciones.

Del total de viviendas rehabilitadas, 12.000 serían para alquiler a precios asequibles, de acuerdo con las mismas previsiones. El primer teniente de alcalde, Xavier Casas, se mostró convencido de que "la suma de inercias de tres gobiernos de la misma sensibilidad [en referencia al PSOE y al PSC] lo hará posible".

Los planes de rehabilitación que proyecta el Ayuntamiento incluyen la mejora de las condiciones de seguridad de los edificios en aspectos como la accesibilidad y el respeto a la sostenibilidad, el patrimonio y los elementos exteriores. También se prevé poner al día las condiciones de habitabilidad de las viviendas, centrándose en los pisos vacíos, que de esta forma podrían incrementar la oferta de alquiler a precios asequibles. El concejal responsable de Suelo y Vivienda, Eugeni Forradellas, se mostró convencido de que estas actuaciones contribuirán también a "evitar cuestiones tan sangrantes como el mobbing inmobiliario".

El paquete de medidas incluye actuaciones de revitalización de seis barrios de la ciudad de acuerdo con el plan de rehabilitación de 40 zonas que ha emprendido el Gobierno catalán.

El consistorio también ha decidido la construcción de 1.823 viviendas protegidas y la creación de 440 plazas en residencias asistidas para personas mayores y estudiantes en el barrio del Poble Sec, el paseo de Santa Coloma, la Illa Robadors, la Colònia Castells y el barrio de Roquetes.

Desde los bancos de la oposición, el presidente del grupo municipal de CiU, Xavier Trias, cuestionó todos estos anuncios y afirmó que el equipo de gobierno municipal carece de "credibilidad para hacer política seria de vivienda". Alberto Fernández Díaz, jefe de filas del Partido Popular, criticó la "falta de concreción sobre las aportaciones municipales y los plazos de ejecución".

Los anuncios tienen "mucha letra y poca piedra", según Fernández Díaz. Xavier Casas replicó en varias ocasiones a los representantes de la oposición que las actuaciones municipales en materia de rehabilitación e impulso de vivienda a precios asequibles "han ido mucho más allá de lo que corresponde a un ayuntamiento". El primer teniente de alcalde aseguró que el 25% de las actuaciones de rehabilitación que se realizan en España corresponden a Barcelona.La sesión plenaria, que arrancó con el debate sobre la política municipal de vivienda, finalizó con una discusión sobre cómo afrontar el problema del excesivo ruido que afecta a algunas zonas de la ciudad. Los integrantes del gobierno municipal y los grupos de la oposición coincidieron en la necesidad de buscar soluciones, aunque discreparon en los sistemas para conseguirlo.

En opinión del grupo municipal de CiU, la solución es hacer cumplir las ordenanzas municipales. "Gobierne, señor Clos", exhortó el presidente del grupo, Xavier Trias, tras responsabilizar al gobierno municipal de la contaminación acústica que aqueja a ciertas zonas de la ciudad.

El presidente del grupo del PP, Alberto Fernández Díaz, afirmó que el fenómeno del ruido "se ha extendido como una mancha de aceite por toda la ciudad". Fernández Díaz instó al gobierno a "perder los complejos y actuar contra los incívicos con pedagogía, pero también con la Guardia Urbana". "Lo que hace falta es autoridad", dijo.

La tercera teniente de alcalde, Imma Mayol, cree que "las condiciones han mejorado respecto a años anteriores" y manifestó: "No tenemos varitas mágicas, pero sí voluntad política. Estamos gestionando la complejidad". Mayol incluso reconoció errores: "Acepto que a veces lo hemos hecho mal, pero estamos en una vía de diálogo".