La Chicana, tango del tierno canalla
De una década a esta parte, el matrimonio bonaerense integrado por Dolores Solá y Acho Estol comparte también maridaje musical al frente de La Chicana, un quinteto que fascina en tierras porteñas por su reinterpretación del legado tanguero. Tango agazapado, su primer trabajo que conoce edición española, acaba de obtener el Premio Gardel a la Mejor Propuesta del Nuevo Tango, una distinción insólita para una obra autoproducida y grabada desde la más absoluta independencia. Los más tiernos canallas de los últimos tiempos pueblan este generoso cancionero de 17 composiciones.
"Nos fascinan los personajes del tango carcelario", explica Estol, "esos tipos malos malísimos que lloran cuando recuerdan a su mamá en medio de la noche oscura". El género, tercia Solá, conserva toda su vigencia porque la marginalidad "sigue siendo el envés del sistema". Y recalca: "Ponés la tele y enseguida aparecen esas gentes que luego habitan en nuestras canciones y en las de muchos otros. Tom Waits, por ejemplo, es un gran tanguero, aunque quizá él aún no lo sepa...".
A La Chicana los tienen por una formación renovadora, fronteriza con la milonga y cómplice de los sonidos "étnicos", pero ellos se sienten herederos de Gardel por línea directa. "Nos gustan, sobre todo, esas guitarras tan rústicas que empleaba. Reflejaban un espíritu rebelde", anota Dolores. Y Acho, siempre complementario, remacha: "El tango nació con una esencia casi punk, de Kaláshnikov, y así debe seguir siendo ahora".
Los autores de joyas como Ayer hoy era mañana o Una iguana y tres monedas son ya algo conocidos en el País Vasco, donde han llenado el teatro Euskalduna, pero confían en conquistar ahora nuevos públicos peninsulares. "El folclor interesa hoy como reacción frente a un rock que ya no es un instrumento de rebelión, sino un producto Pepsi", asegura Solá. "El éxito de Buenavista Social Club, Cesaria Évora o Manu Chao tiene ese mismo denominador común. Incluso el pop se va folclorizando. Alejandro Sanz puede gustarte o no, pero ese regusto aflamencado le diferencia de Ricky Martin y sus secuaces...".
Acaban de grabar su primer vídeo musical, para ese delicioso tango medio turco que es Sopapa, pero no quieren que la euforia les embriague. "En un proyecto hermoso y guiado por la ternura, las cosas siempre han de acontecer laboriosamente", sentencia Estol.
La Chicana actúa el próximo día 6 en el festival La Mar de Músicas (Cartagena) y el día 7 en la sala Clamores de Madrid.
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