Un juzgado investiga el traslado de tierras contaminadas en el solar de Abandoibarra
Dos informes hallan muestras de diez productos tóxicos en materiales llevados a Zamudio
Un juzgado de Bilbao está investigando la posibilidad que se hallan trasladado tierras contaminadas desde el solar de Abandoibarra, la principal zona de expansión de la capital vizcaína, a una finca en Zamudio. La denuncia, formulada por el grupo ecologista Lur Maitea, señala que una empresa constructora llevó el material, contaminado por diez productos tóxicos, y lo ocultó al consistorio de Zamudio. Sin embargo, el Ayuntamiento, tras conocer los hechos, permitió el traslado de tierras, siempre según la denuncia. El Juzgado de Instrucción número 2 de Bilbao ha pedido las licencias de obras tanto en Abandoibarra como en Zamudio y la toma de muestras del material vertido.
Lur Maitea presentó el 15 de junio una denuncia por presunto delito contra el medio ambiente y esta semana ha formulado una querella criminal. Los hechos se remontan a 2002, cuando, según la denuncia, la constructora Enrique Otaduy solicitó una licencia de obras para depositar tierras en una finca rural en Zamudio, en una vaguada del barrio de Geldo, procedentes de las obras que se están acometiendo en Abandoibarra -la construcción del hotel Sheraton, ya abierto, y del centro comercial y de ocio Zubiarte, todavía en obras-.
El consistorio de Zamudio autorizó esta actividad "para el acondicionamiento" de dicha finca y "en ningún momento da pie legal a verter residuos peligrosos", siempre según los denunciantes. El grupo ecologista aporta dos informes, elaborados por las empresas Idom y Adirondack a petición del consistorio y de los promotores del centro de ocio, respectivamente. Ambos estudios, referidos a los suelos de Abandoibarra que luego son trasladados a Zamudio, concluyen que las tierras trasladadas muestran residuos de aluminio, arsénico, cadmio, cobre, cromo, mercurio, níquel, plomo, zinc y sulfuros.
Aunque el aluminio presenta valores de más de 5.000 miligramos por kilo, Lur Maitea apunta que los residuos más dañiños para la salud son los de cadmio, que oscilan entre 0,13 y cinco miligramos, y los sulfuros, que alcanzan los 27 miligramos por kilo.
La denuncia sostiene que la constructora realizó vertidos durante casi dos años, cuando la licencia municipal limitaba la actividad a seis meses. El Ayuntamiento, según consta en la documentación municipal, se cerciora en octubre pasado, gracias a su alguacil, de que continuaban los rellenos de la finca "mediante lodos procedentes de la zona de Abandoibarra". Tras ello, se comunica a la constructora que la licencia había caducado, los límites de vertido estaban superados y que debe acreditar "la idoneidad" de las tierras depositadas.
En esas fechas, el Ayuntamiento contacta con la sociedad ambiental Ihobe, dependiente del Gobierno, para que le asesore y se propone la paralización inmediata del vertedero y la definición de los vertidos.
Sin embargo, la denuncia agrega que en diciembre el consistorio concede otra licencia de obras para "el acondicionamiento" de otra vaguada, situada a 100 metros, "con la autorización de Ihobe".
Los ecologistas relatan al juzgado que en Abandoibarra los lodos extraídos se han dejado "en enormes pilas para que vayan secándose y lixiviando [los líquidos tóxicos que se filtran al suelo]". Aseguran que no tienen constancia de que la empresa constructora disponga de la autorización de gestor de residuos y "los camiones no llevan identificativo alguno que señale la mercancía. Van sin cubrir y desprendiendo polvo y parte de su carga".
A ello añaden que el vertedero se ubique en un área rural, "lo que es ilegal", y la existencia de un arroyo "a los pies de la finca donde se están vertiendo residuos peligrosos", con el riesgo de que los lixiviados se filtren al cauce. Además, creen que existe también un delito ecológico por el almacenamiento por parte de la empresa Enrique Otaduy de residuos peligrosos "durante un tiempo sin precisar" en Abandoibarra.
Tras la denuncia, el Juzgado de Instrucción número 2 de Bilbao ya ha solicitado a la constructora las licencias de obras tanto en Abandoibarra como en Zamudio y la toma de muestras del material vertido en estas dos zonas. Además, se ha pedido al consistorio de Zamudio todo el expediente administrativo relativo al vertedero que autorizó. El Departamento de Medio Ambiente aplazó hasta hoy comentar la denuncia.
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