La cumbre de la UE negocia los últimos flecos de la Constitución

Los líderes de los 25 países de la Unión Europea negociaban anoche los últimos capítulos abiertos de la Constitución. "Nos acercamos a un acuerdo", declaró el presidente de turno, el irlandés Bertie Ahern. Soy "optimista", afirmó el presidente francés, Jacques Chirac. Todos estaban convencidos de que Europa tendrá hoy la primera Constitución de su historia, aunque seguían negociando los últimos cuatro litigios abiertos. El más importante: el reparto de poder. El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, logró el apoyo de Polonia a su propuesta, que aseguró que defenderá "hasta el final".

La presidencia irlandesa de la UE había propuesto la víspera que las decisiones se tomen por el 55% de los Estados que representen el 65% de la población. El Gobierno español quiere llegar al 56% de los Estados y al 66,66% de la población, lo que le permitirá tener más facilidad para lograr minorías de bloqueo. Zapatero se reunió con el primer ministro polaco, Marek Belka, y logró su acuerdo a la propuesta española. España y Polonia bloquearon en diciembre el acuerdo sobre la Constitución, pero por otro motivo. Ambos defendían entonces el reparto acordado en el Tratado de Niza.

El ministro español de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, afirmó que la propuesta irlandesa es "un buen comienzo". Los líderes de la UE negociaban anoche, además del reparto de poder, las discrepancias sobre el Pacto de Estabilidad, la exigencia británica de mantener el veto en fiscalidad y la referencia al cristianismo.

En la cena, los jefes de Estado y de Gobierno trataron sobre el futuro sustituto de Romano Prodi al frente de la Comisión. Los populares europeos presentaron al británico Chris Patten como candidato a presidente, rechazado por Francia por pertenecer a un país que no ha ingresado en el euro.