Protesta por la prohibición de la Consulta Social Europea
Una veintena de miembros de la Consulta Social Europea se concentraron ayer ante la Delegación del Gobierno de Barcelona para pedir responsabilidades políticas por la prohibición de instalar el domingo urnas cerca de los colegios electorales para realizar un referéndum paralelo a las europeas. Los concentrados llevaban las bocas tapadas con esparadrapo en señal de protesta. El referéndum planteaba si son necesarios más mecanismos participativos en la democracia europea o si la Constitución Europea debe reconocer los derechos civiles, si debe limitarse el gasto militar, si es necesario el ahorro energético o si se debe frenar la especulación inmobiliaria.
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