"La era del barril de crudo por debajo de los 30 dólares toca a su fin"

Rafael Ramírez quiso ayer volver lo antes posible a Caracas tras la cumbre de la OPEP en Beirut. Le esperaban 19 horas de vuelo en un avión privado, un tanto pequeño para un hombre que mide casi 1,90 como él. Tenía varias entrevistas pedidas, así que decidió dar una a varios medios de prensa al mismo tiempo. Muchos querían hablar con Ramírez, porque es afable, comunicativo; pero, sobre todo, porque Venezuela se había opuesto en un principio a un aumento de la producción de la organización. No consiguió frenar el empuje del peso pesado de la organización, Arabia Saudí, partidaria del incremento, pero, aliado con Irán, logró dividir el aumento en dos etapas. La OPEP aumentará su extracción en dos millones de barriles en julio y otro medio millón en agosto, siempre que el crudo no baje de los 30 dólares. Según Ramírez, para Venezuela, los altos precios del crudo son el resultado de la política agresiva de EE UU en Oriente Próximo. Los ataques terroristas que ha sufrido Arabia Saudí, y que ponen en vilo al mercado, son consecuencia de lo mismo. Ayer el precio del barril de brent se situó por debajo de 36 dólares mientras el texas de Estados Unidos, lo hizo por debajo de 39.

"La organización está al borde de su capacidad de producción máxima"

"Si el debate se centra sólo en la producción, no se logrará estabilizar los precios"

Pregunta. ¿Cree realmente que el aumento de producción aprobado el jueves logrará abaratar el crudo?

Respuesta. El tema del precio no tiene mucho que ver con los límites de producción porque estos dos millones que pondremos en el mercado desde julio ya existen en el mercado. Son otros los factores que encarecen el petróleo, como la especulación, los cuellos de botella en la industria del refino en EE UU, la violencia en el Medio Oriente. Independientemente de nuestras posiciones particulares en el seno de la OPEP, hemos tomado una decisión conjunta y garantizamos que esos dos millones de barriles estarán en el mercado. Es una buena señal la que da la OPEP y , por eso, Venezuela la ha respaldado. Pero si el debate sobre la escalada del crudo se sigue centrando sólo en los niveles de producción de la OPEP me temo que no se logrará la estabilización de los precios.

P. La OPEP asegura al mercado dos millones de barriles más desde julio y otro medio millón más en agosto. ¿Este último aumento está garantizado o puede llegar a anularse?

R. Tendría que desplomarse el precio para que se anulase ese aumento de producción.

P. ¿A cuántos dólares equivale la palabra desplome?

R. Veamos los factores. Imagínese que en EE UU, en plena campaña electoral, la Reserva Federal, tal y como ha anunciado, sube los tipos de interés. Más de 80.000 contratos del mercado de futuros del crudo pueden ser abandonados por los especuladores, que en un momento deciden salir de este mercado para tomar posiciones en cualquier otro donde logren más beneficios derivados de la subida de los tipos. Si esto sucede, tumbas el precio del crudo en unos ocho dólares de la noche a la mañana. Esto es un desplome del crudo. Si el movimiento atrapa a la OPEP bombeando casi al máximo, sus miembros la pasarán muy mal; por eso nos reuniremos el 21 de julio en Viena para ver cómo va el mercado y ver si seguimos adelante con más aumentos de producción o no.

P. ¿Cuando habla del precio se refiere al de referencia para Europa o al de la OPEP?

R. Me refiero al de la cesta OPEP. [La cesta OPEP, compuesta de siete tipos de crudo distintos, cotiza normalmente dos dólares por debajo del tipo brent de petróleo del mercado de Londres, que es el que sirve de referencia para Europa].

P. ¿No cree que aumentar las cuotas de producción al nivel que ya están es más una decisión de relaciones públicas que de compromiso con el mercado?

R. No es un acto publicitario. Cómo va a ser eso si todos conocen los datos de producción. Lo importante es que la OPEP se compromete a mantener su actual nivel de producción los próximos meses. Es un compromiso de la organización y todos vamos a trabajar por ello. Ahora, es también importante que se sepa que la organización está al borde de su capacidad de producción máxima. Éste es un elemento que hay que tenerlo muy en cuenta, porque aún hay gente que ve al petróleo como una simple materia prima y no es así, es un recurso natural que se agota, y cuando se termina la capacidad de producción no hay nada que hacer. Ahí vemos cómo el mar del Norte ha entrado en declive y ya casi no tiene nada que ver con el mercado petrolero. Esto hay que pensarlo cuando se le pide a la OPEP que produzca y produzca, más y más. Lo podemos hacer, pero hay un límite, y cuando los productores se queden sin crudo, ¿quién velará por nosotros? Recientemente, en Europa se dijo que los impuestos sobre los carburantes iban a mantenerse. Bien, pero entonces eso, ¿qué significa?, que es la OPEP la que siempre debe tomar medidas cuando suben los precios. Nosotros también queremos que del otro lado se tomen medidas. No se puede pedir todo a la OPEP.

P. ¿Y cuánto crudo le queda al mundo?

R. Nosotros no vamos a especular. Lo cierto es que, a corto y medio plazo, podemos aumentar nuestra capacidad. Sólo digo que hay que recordar que el crudo es un recurso que se agota y que no hay que perder de vista esto. [Según datos de la OPEP, las reservas probadas del mundo son de 1,1 billones de barriles, de los que unos 845.000 millones, el 78,7%, están en manos de la OPEP. Actualmente, según la Agencia Internacional de la Energía, el mundo consume unos 80 millones de barriles al día y superará los 100 millones para 2020].

P. ¿Cree que si los años setenta supusieron el fin del precio del barril por debajo de los 10 dólares, esta década representa el fin del precio por debajo de 30 dólares?

R. Sí, yo creo que los tiempos del petróleo barato, por debajo de los 30 dólares el barril, toca a su fin. Los países consumidores tienen que empezar a racionalizar de verdad el uso del crudo. Fíjese que las economías asiáticas y una buena parte de la estadounidense son tremendamente ineficientes en su consumo de energía. Venezuela propondrá revisar al alza la banda de precios de la OPEP, que hoy estima un precio justo del barril entre 22 y 28 dólares. Vamos a hacer nuestra propuesta en septiembre. Nosotros no vamos a renunciar a exigir un precio justo que nos permita desarrollarnos, cumplir las exigencias medioambientales de los países consumidores y, al mismo tiempo, cuidar nuestro propio entorno y el de nuestra gente.

P. ¿La petrolera estatal venezolana, PDVSA, se asociará a la nueva empresa pública argentina, Enarsa, para competir con Repsol YPF en la producción de crudo en Argentina?

R. Ya hemos firmado un convenio con [la argentina] Enarsa para colaborar en la exploración de yacimientos marítimos que no han sido privatizados. Ya hay un acuerdo político entre Venezuela, Argentina y Bolivia, al que pronto se unirá Brasil, y después de eso vendrá la relación entre las empresas petroleras estatales para desarrollar proyectos conjuntos.