García Verdugo señala el potencial de las células madre cerebrales
El cerebro humano cuenta con una zona rica en células madre con un "alto potencial" para regenerar lesiones. Pero los investigadores no saben cómo activar estas células para conseguir que se dirijan a las zonas dañadas y ayuden a recuperar la funcionalidad perdida. Así lo señaló ayer José Manuel García Verdugo, del Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biología evolutiva de la Universidad de Valencia, que en un encuentro celebrado ayer en Valencia se refirió a las tareas que realizan en esta dirección.
García Verdugo participó en un trabajo publicado recientemente en Nature en el que se describió que en una zona del cerebro -concretamente en la pared de los ventrículos laterales- existe una franja de astrocitos (células cerebrales) que mide unos 10 centímetros por 500 micras y que se comportan como células madre en el laboratorio. Cultivadas in vitro se manifestaron como células progenitoras y dieron lugar a neuronas, oligodendrocitos -los productores de mielina, una sustancia que recubre parte de la neurona, y cuyo deterioro se relaciona con el Alzheimer- y astrocitos, como las células originales.
"Sabemos que hay células madre en el cerebro y que proliferan in vitro", apuntó ayer el investigador de la Universidad de Valencia. Sin embargo aún se desconoce cómo emplearlas para sustituir o mejorar las células dañadas. En ello trabajan ahora los investigadores. Concretamente en conocer cómo activarlas para que curen células enfermas. García Verdugo comentó que una posibilidad sería extraer los astrocitos para manipularlos en cultivos y, una vez transformados, por ejemplo, en neuronas trasplantarlas en partes del cerebro lesionadas. Otra, más compleja pero menos invasiva, sería la de conocer las claves para hacer que la modificación celular tuviera lugar en el propio órgano, de forma que las células madre se transformaran en el mismo cerebro y fueran capaces por ellas mismas de dirigirse a las zonas que debieran regenerar.
Enfermedades genéticas
Al encuentro de ayer asistió también la directora del Instituto de Células Madre de la Universidad de Minessota (EEUU), Catherine Verfaillie, que avanzó que el uso de células madres puede ofrecer buenos resultados terapéuticos para combatir enfermedades genéticas y raras, aunque reconoció que es muy pronto para hablar de resultados clínicos. Verfaillie, jefa del grupo que logró diferenciar células madre en la médula ósea de adultos, resaltó las ventajas que supondrá en un futuro el desarrollo de los tratamientos con células madre, ya que "suplantarían la falta de órganos para trasplantar, prevendrían los rechazos de los injertos y permitirían desarrollar bancos de tejidos compatibles con los pacientes". La investigadora estadounidense apuntó que este tipo de terapias se podrían aplicar contra enfermedades como diabetes, dolencias cardiovasculares o patologías del sistema nervioso.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.