La OEA y Carter verifican las firmas para el referéndum contra Chávez

En medio de una creciente tensión y bajo la permanente supervisión internacional, el proceso de ratificación de firmas para el referéndum contra el presidente venezolano, Hugo Chávez, cumplió ayer la última de sus tres jornadas.

Comienza ahora un periodo de suspense, pues el Consejo Nacional Electoral (CNE) ha ofrecido los resultados, como muy temprano, para la noche de mañana, martes, pero lo más probable es que no lo haga hasta el jueves o viernes, dada la trascendencia del anuncio. El tribunal electoral deberá decir si la oposición, coaligada en la Coordinadora Democrática, logró o no reunir las 550.000 firmas que necesitan para, sumadas al 1.900.000 ya declaradas válidas, alcanzar el mínimo de 2.400.000 exigidas para activar el referéndum.

Las firmas fueron recogidas entre el 28 de noviembre y el 1 de diciembre de 2003, pero alrededor de 900.000 fueron declaradas "dudosas" por diversas razones y, por tanto, sometidas a reparo.

El ex presidente de Estados Unidos Jimmy Carter expresó su esperanza de que los resultados sean presentados pronto. Carter se reunió ayer con el presidente Chávez en el palacio de Gobierno y luego prosiguió visitando los centros instalados por el CNE. Chávez declaró tras el encuentro que si el CNE dictamina que la oposición recogió las firmas necesarias "iremos a referéndum, y si me lo ganan, me voy".

El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria, también visitó las mesas, en algunas de las cuales se han presentado incidentes menores.

El sábado fueron detenidas varias personas portando grandes cantidades de cédulas de identidad, supuestamente para efectuar reparos a nombres de otros, algunos ya fallecidos.

La Coordinadora Democrática denunció que partidarios del Gobierno agredieron varios centros de ratificación y dos sedes del partido Acción Democrática. También acusaron a los oficiales de las Fuerzas Armadas de interferir en el proceso a favor del Gobierno de Chávez.