El regreso definitivo más esperado
226 soldados españoles procedentes de Irak llegan al aeropuerto de Almería
El segundo contingente de las fuerzas de apoyo al repliegue de las tropas españolas de Irak, formado por 226 militares y 20 civiles, de los que ocho eran intérpretes, llegó ayer por la mañana al aeropuerto de Almería. Los soldados, que llegaron a bordo de un avión comercial de Air Europa, fueron recibidos por un comisión de la Brigada de la Legión Rey Alfonso XIII con base en Viator (Almería). La formalidad del acto se acabó cuando se ordenó la ruptura de filas y la mayoría de los soldados salió corriendo para saludar a familiares y amigos.
El comandante José Antonio Recena, que ejerció de portavoz de los recién llegados, explicó que la noche anterior a la partida el jefe del Contingente de Apoyo al Repliegue Español (Conapre), el general de brigada José Muñoz, le había ordenado que los soldados rompieran filas "cuanto antes".
El general Muñoz ordenó que los soldados rompieran filas "cuanto antes"
Y así se hizo. Cuando llegó ese esperado momento, empezaron las carreras, los abrazos, los llantos y los besos, sobre todo, los besos. Algún que otro pasodoble de la banda de música allí desplazada ayudó a aguantar la espera a más de un familiar y también a desdramatizar los reencuentros. El comandante José Antonio Recena calificó de "normal" la situación de riesgo vivida por los legionarios españoles.
A él, su esposa, Petri, le esperaba en Ronda, hacia donde partieron de Almería buena parte de los militares. Petri, acostumbrada ya a misiones de gran calado, describió con templanza las claves de la larga espera a su marido. "José Antonio ha estado en muchas misiones: Yugoslavia, Albania y ahora Irak. Y en diferentes tercios. Recuerdo que en Yugoslavia las cosas estaban muy mal y que en Albania fue más bien ayuda humanitaria. Lo peor de todo es la distancia y el recuerdo. Pero en esta ocasión ha sido rápido", explicó la mujer del comandante Recena.
Para Petri, la mejor manera de llevar la ausencia tiene un secreto: no ver nunca el telediario. "Me he limitado a no ver nunca ningún informativo, tal y como me decía mi marido", comenta la mujer del militar.
Los militares, integrantes del Contingente de Apoyo al Repliegue Español, formaban parte del segundo contingente del repliegue que ha llegado a España después de que el primero, integrado por 144 militares, lo hiciera el pasado viernes. De los 226 soldados que arribaron ayer al aeropuerto almeriense, 27 siguieron hasta Madrid en el mismo avión de Air Europa, mientras que los otros 199, todos ellos legionarios, se quedaron en Almería. A partir de ahí regresarán a sus destinos habituales: Ronda (Málaga), Melilla o la propia Almería.
Fuentes de la Legión señalaron que hoy se concretará cuándo llega el próximo avión con militares que han estado en Irak. En principio, está previsto que el aeropuerto de Almería acoja la llegada de otro contingente la madrugada de mañana, domingo.
El comandante Recena, que se desplazó hasta Irak el 15 de abril, ha estado destinado en la base Almanzor, a 1,5 kilómetros de la base España. Recena ha participado en la formación de un batallón iraquí y, en este tiempo, se ha familiarizado con sus componentes. "Hemos realizado controles de carreteras y prácticas de seguridad con este batallón que será el ejército futuro de aquel país", señaló.
En plena polémica por las fotografías publicadas sobre malos tratos y torturas en la cárcel de Abu Ghraib a reclusos iraquíes, el comandante Recena se mostró rotundo: "A ningún militar le gusta verlas. Sobre este asunto ya están actuando la autoridades correspondientes".
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