Los sindicatos califican de "insuficientes" las 2.350 plazas públicas más de infantil anunciadas

El pulso mantenido en las últimas dos legislaturas entre los sindicatos de izquierda y la Administración educativa del PP por la práctica ausencia de plazas de infantil para niños de 0 a 3 años en la red de colegios públicos -sólo existen 33 guarderías públicas, pero gestionadas por Bienestar Social- continúa en plena negociación por la planificación del próximo curso. Los sindicatos de CC OO, Fete-UGT y STEPV consideran "insuficientes" las 2.350 plazas públicas previstas por Educación para el próximo curso, ante una demanda que CC OO cifra en 20.000 niños.

El expediente de planificación educativa para el próximo curso 2004-05 aumentará en 2.350 puestos escolares la oferta pública. Esto supone 94 unidades/ aulas más del primer tramo de enseñanza infantil en la red de colegios públicos. Un avance que los sindicatos consideran "insuficiente" en una comunidad donde esta etapa está implantada prácticamente fuera de la red educativa pública (el 98% de la escolarización está gestionada por guarderías privadas y Ayuntamientos).

En la actualidad, el número de plazas -si bien no públicas- pero sí "parcialmente gratuitas" subvencionadas asciende a 11.480 puestos escolares distribuidos entre centros municipales y guarderías concertadas homologadas por Educación [lo que no incluye a los niños atendidos en colegios privados, simples ludotecas o centros sin homologación]. El Consell se ha comprometido a aumentar en 6.000 plazas semigratuitas más el cupo en octubre próximo (unas 17.000 en total).

Un cifra insuficiente, según los datos del último estudio de CC OO, que cifra el censo de población infantil de menos de 3 años en 20.000. El STEPV ha denunciado esta semana que la situación es "insostenible" en zonas como Castellón y pide la creación de una red de escuelas infantiles gestionadas por los Ayuntamientos, pero financiadas por el Consell. Fete-UGT, por su parte, considera que la derogación de la reforma educativa del PP favorece un giro en la actual descoordinación y la vuelta a un modelo pedagógico y no asistencial (calificado de aparcaniños) de educación infantil.