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LA CRISIS DE TERRA MÍTICA

El consejo de la CAM rechaza la propuesta de un vicepresidente de asumir el rescate del parque de ocio

Las declaraciones políticas de los presidentes de las Cortes o de la Diputación de Alicante, Julio de España y José Joaquín Ripoll, caldearon el ambiente previo a la reunión del consejo de administración de la CAM que, según uno de los asistentes, fue "un auténtico aquelarre". Armando Sala, vicepresidente responsable de la dirección territorial de la caja en Alicante, sugirió la posibilidad de que la CAM asumiera el rescate de Terra Mítica, incluso en solitario, invocando la importancia del turismo para la economía provincial.

La inmediata reacción de otro alto responsable de la caja ante la propuesta de un directivo próximo a Zaplana evidenció que el PP se ha dividido en la entidad. Intervenciones de los técnicos y otros consejeros diluyeron la iniciativa, que no llegó siquiera a someterse a votación del consejo. Pero el intercambio fue tenso, según la misma fuente.

Los riesgos acumulados por la CAM en Terra Mítica superan los 50 millones de euros, una cifra sin parangón en la historia de las participaciones empresariales de la caja alicantina. Y la posibilidad de rescatar los 83 millones pendientes de pago del crédito sindicado concedido a Terra Mítica en 1999 por una veintena de entidades financieras desborda cualquier lógica bancaria.

La propuesta esbozada por Sala recibió cumplida respuesta de otro alto responsable de la entidad, quien defendió la suspensión de pagos de Terra Mítica como la mejor salida a la complicada situación financiera que atraviesa la sociedad. El mismo consejero subrayó que Terra Mítica estaba mal concebida en origen y que es necesario reducir las dimensiones del parque de acuerdo con un nuevo plan de negocio antes de embarcarse en un rescate sin ninguna posibilidad de éxito.

Otro de los presentes en la reunión del consejo sugirió que la participación de la CAM en Terra Mítica y la acumulación de riesgos asumidos por la caja en la sociedad promotora del parque, que solicitó el miércoles la suspensión de pagos y declaró un pasivo de 218 millones de euros, requiere depurar responsabilidades para garantizar la solvencia futura de la entidad y el interés de los ahorradores. La posibilidad de depurar responsabilidades tampoco pasó a mayores y no llegó a votarse. Pero ha sido el proceder habitual de la CAM cuando ha tenido que afrontar otros negocios fallidos, según un miembro del consejo.

La tensión en torno a la situación de Terra Mítica fue resuelta por la nota oficial remitida por la CAM con una declaración voluntariosa: "El consejo ha sido informado de la situación financiera actual de la sociedad Terra Mítica, Parque Temático Benidorm S.A., confiando en que las decisiones adoptadas por dicha sociedad supongan un punto de inflexión en la trayectoria de esta importante compañía de la Comunidad Valenciana".

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