El presidente de la Cámara de Cuentas acusa al PP de cursar su dimisión a sus espaldas

El presidente de la Cámara de Cuentas, Ramón Muñoz Álvarez, envió ayer un escrito a la Asamblea de Madrid en el que acusa al portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Antonio Beteta, de haber utilizado una carta de renuncia a su cargo sin su permiso. Según fuentes del PP en la Asamblea, fue una diputada regional quien se encargó de entregar en el registro la carta manuscrita de Muñoz el pasado viernes. Misiva cuya redacción, según Muñoz, fue una exigencia de la propia presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre. El PSOE ha pedido un informe jurídico que delimite la validez de la dimisión.

El culebrón de la Cámara de Cuentas continúa en un nuevo episodio donde se mezclan intrigas parlamentarias y supuestas suplantaciones de voluntad.

El pasado viernes se registró en la Asamblea de Madrid un manuscrito firmado por el presidente de la Cámara de Cuentas, Ramón Muñoz, en el que presentaba la renuncia a su cargo. Parecía que con esto Esperanza Aguirre lograba atajar la situación de absoluta inactividad en la institución propiciada por la actuación del propio Muñoz (elegido a instancias del PP), según habían denunciado tanto la oposición como varios de los integrantes del consejo de la Cámara de Cuentas.

Ayer, Ramón Muñoz comunicó por escrito a la presidenta de la Asamblea de Madrid, Concepción Dancausa, no sólo que su intención no es dimitir, sino que alguien "había suplantado" su "voluntad" al presentar una carta de cese sin su consentimiento.

La Cámara de Cuentas, organismo que se ocupa de fiscalizar la actividad económica, presupuestaria, financiera y contable del sector público madrileño, no logró aprobar un plan de fiscalización para el año 2003, tampoco ha logrado dotarse de presupuestos y, además, no ha alcanzado un acuerdo para realizar un plan de fiscalización para el presente ejercicio 2004; es decir, inactividad total.

En su escrito, Muñoz afirma: "El viernes 14 de mayo no estaba en mi intención renunciar al cargo de presidente de la Cámara de Cuentas, para el que fui elegido por unanimidad por los miembros del consejo el día 27 de diciembre de 2000". Pero no sólo eso; en esta carta, Muñoz desvela que el día anterior, el jueves 13, tuvo una "entrevista con la presidenta del Gobierno de la Comunidad" en la que ésta le propuso que dimitiera, a lo que Muñoz asegura que le mostró que su "intención era la contraria". Cuenta Muñoz que también se lo comunicó al vicepresidente primero, Ignacio González.

Sin embargo, el presidente de la Cámara de Cuentas reconoce haber escrito la carta de renuncia a su cargo que fue registrada, según fuentes del PP, por una diputada regional del grupo parlamentario popular. Pero desvela en qué términos se produjo la redacción de esa renuncia: "El documento autógrafo que da lugar a esta comunicación, tuve la honestidad de redactarlo y suscribirlo el día 4 de febrero de 2004 en el despacho del señor portavoz del Partido Popular [Antonio Beteta] tras la petición, por parte de éste, a los cuatro consejeros [de la Cámara de Cuentas] propuestos por el PP de la dimisión que, según él, nos exigía la presidenta del Gobierno si no nos poníamos de acuerdo en ese momento". Dos de estos consejeros, según fuentes populares -Ramón García Mena y Enrique Álvarez Tólcheff-, se negaron a redactar una carta de renuncia.

El presidente asegura que Antonio Beteta traicionó su palabra de no hacer uso de esa carta de renuncia sin su consentimiento: "El señor portavoz [Beteta] me aseguró días después, telefónicamente, que ese documento lo guardaba en su caja de seguridad y que no lo 'pondría en movimiento' sin mi autorización expresa". Por todo ello, Ramón Muñoz pide que se abra una investigación en la Asamblea de Madrid "para tratar de conocer quién, cómo y por qué se ha suplantado" su voluntad.

Ayer por la mañana, Ramón Muñoz se negó a hacer algún tipo de declaraciones, ni sobre su carta de renuncia ni sobre la forma en la que redactó este documento. Se remitió simplemente al escrito que envió a la Asamblea de Madrid. "Todo lo que se quiera saber está en ese escrito", concluyó.