El comité de Martínez Valero denuncia la retirada de la maquinaria el fin de semana previo al cierre

El comité de empresa de la fábrica de calzados Martínez Valero de Elche denunció ayer el desmantelamiento de la factoría -especialmente la maquinaria- el fin de semana previo al cierre de la industria acordado por la propiedad de forma sorpresiva el lunes. "Desde el cierre no hemos podido entrar a la fábrica ni tan siquiera a recoger nuestros efectos personales. Sospechamos que la hayan desmantelado", dijo Juan Antonio Macià, miembro del comité de empresa, de UGT. "De hecho, tenemos constancia de que durante el pasado sábado y domingo varias grúas estuvieron sacando la maquinaria de la fábrica para trasladarla a otro lugar", añadió el sindicalista.

El comité de empresa sospecha que el cierre de la factoría tenga por objetivo la reapertura de la empresa "en condiciones laborales más favorables". Martínez Valero contaba con una plantilla de 146 trabajadores, todos fijos. El Consell ha calificado de "ilegal" el cierre por no mediar un previo expediente de regulación de empleo y ha anunciado la apertura de un expediente sancionador con una multa de 12.000 euros.

Los representantes de los trabajadores y el de los propietarios mantuvieron en la tarde de ayer el primer encuentro tras la clausura. En la reunión, que no había concluido al cierre de esta edición, el comité de empresa mantuvo su rechazo a la clausura de la actividad de la factoría y exigió retomar la actividad mediante un expediente temporal y parcial de regulación de empleo.

Los trabajadores afectados por el cierre realizaron ayer las primeras protestas con una concentración ante las puertas de la fábrica. Posteriormente, los empleados se trasladaron al domicilio particular del propietario, el empresario Manuel Martínez Pomares. Los operarios concluyeron la movilización con una concentración en la plaza de Baix, junto al Ayuntamiento de Elche.Los trabajadores reivindicaron la apertura de negociaciones con los propietarios para reabrir la industria.

La firma Martínez Valero es una de las fábricas emblemáticas del sector del calzado ilicitano. La industria comenzó a operar en la década de los sesenta, bajo la dirección del desaparecido empresario Manuel Martínez Valero. En su período de mayor auge la firma ilicitana llegó tener abierta una tienda en la mítica Quinta Avenida de Nueva York. Finalmente, el heredero de Martínez Valero, su hijo, dio por extinguida su actividad al no poder afrontar un pasivo de 5 millones de euros.