La Feria de Abril, puerta del Fòrum
La fiesta de los andaluces emigrados a Cataluña prologa el arranque del foro internacional que se celebrará en Barcelona
Día de contrastes para la primera jornada de la Feria de Abril. Por la mañana, tormentosa sesión del plenario del Ayuntamiento de Barcelona a propósito de la polémica iniciada días atrás por el segundo teniente de alcalde del Consistorio, Jordi Portabella, que ha lanzado sombras sobre la transparencia de la gestión de la feria y la catalanidad de la misma. Ayer, Portabella fue objeto de duras críticas por sus propios socios de gobierno -PSC e ICV- y el grupo municipal del Partido Popular azuzó la cuestión reivindicado el "bilingüísmo enriquecedor".
Pero a última hora de la tarde, minutos antes del encendido de las luces que dará el pistoletazo de salida a la Feria de Abril, las disputas en el Plenario parecen perder importancia. Todos los partidos políticos, excepto ERC e Iniciativa, alinean sus casetas en el recinto de la Feria como buenos vecinos, dispuestos a disfrutar sin problemas de los finos y las tapas de jamón.
Una de las mayores instalaciones es la de la organización del evento, en cuyo interior se reproduce una Feria en miniatura. Bajo la carpa conviven las casetas de las diversas instituciones organizadoras; la Federación de Entidades Culturales Andaluzas (FECAC), los Ayuntamiento de Barcelona y otras localidades del área metropolitana, la Generalitat y... el puesto del Fòrum de las Culturas. Cabe recordar que la Feria está instalada a los mismo pies del Fòrum y que ambos eventos se solaparan un día. Como indica uno de los miembros del FECAC, "podríamos afirmar que la Feria es la puerta del Fòrum".
Por la Feria se ven -de momento- pocos vestidos de gitana, pero sí se aprecian muestras de la creciente multiculturalidad barcelonesa. Los feriantes ofrecen tanto gorros sevillanos como artesanía suramericana, mientras mujeres con velo pasean a sus niños por el recinto ferial. Pero las similitudes entre el Fòrum y la Feria no acaban ni en este espíritu de mezcla cultural ni en la vecindad de sus instalaciones, sino que además los dos eventos coincidirán en tiempo y espacio: la Feria cerrará sus puertas al día siguiente de la inauguración del Fòrum, y el año que viene se celebrará en el nuevo recinto a los pies de Diagonal Mar.
La Feria no sólo propone actividades lúdicas. Entre casetas cuya decoración recuerda a la de un parque temático emerge la carpa instalada por el Museo de Historia de Cataluña. En su interior se ofrece a los visitantes un avance de la futura exposición sobre la relación entre Salvador Dalí y Federico García Lorca. Como destaca el diseñador de la exposición, un año más el Museo pretende destacar los nexos culturales entre Cataluña y Andalucía.
Entre los paseantes destaca un chico que se pasea luciendo una camiseta con la provocadora inscripción: "En la Feria, + gambas y - chorizos". Como él mismo indica, que cada uno interprete lo que quiera.
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