Barcelona incrementará la atención domiciliaria el 38% en dos años
Cáritas y otras organizaciones prestarán parte del servicio a los ancianos
El Ayuntamiento de Barcelona dio ayer un nuevo paso para crear un servicio de asistencia domiciliaria para ancianos que iguale, al menos, al del resto de los municipios catalanes. El concejal de Servicios Sociales, Ricard Gomà, firmó un convenio con Cáritas para aumentar el 12% el número de ancianos atendidos. Actualmente 6.000 personas reciben ayuda a domicilio, una cifra que se incrementará el 38% en dos años.
Barcelona tiene importantes carencias en los servicios de atención a sus ancianos. La falta de residencias geriátricas públicas hace que muchas personas que deberían ingresar en una de ellas sólo logren acceder a la atención domiciliaria, lo que no resuelve sus problemas y, además, resta plazas a los ancianos que sí responden al perfil para acceder a este servicio. La ayuda en la limpieza del hogar, las compras, la higiene personal y la cocina son los servicios más comunes que prestan las trabajadoras familiares.
En Barcelona, donde el 23% de la población tiene más de 64 años, sólo se atiende a 6.000 ancianos en su domicilio, menos del 2% de los habitantes de esa edad. La Asociación Española de Geriatría y diferentes organismos internacionales recomiendan que esta ayuda llegue al menos al 5% de los ancianos, con lo que Barcelona debería doblar sus esfuerzos en este sentido para acercarse al objetivo.
El concejal de Servicios Sociales, Ricard Gomà, afirmó ayer que esta recomendación no podrá cumplirse hasta la próxima legislatura, pero se comprometió a aumentar cada año la dotación presupuestaria. El incremento será del 15% para este ejercicio y del 23% el próximo.
Esta inyección económica es necesaria puesto que Barcelona tiene una población especialmente envejecida y las inversiones en asuntos sociales estuvieron congeladas durante muchos años por falta de sintonía política con el Gobierno catalán.
Ancianos e inmigrantes
Con el acuerdo firmado ayer, el convenio de Cáritas con el Ayuntamiento aumenta cerca del 11,5%, lo que reportará a esta institución unos ingresos de 547.000 euros anuales. La mayor parte de este dinero servirá para prestar ayuda domiciliaria a ancianos, aunque también permitirá mejorar la atención a las familias sin recursos, a los sin techo y a los inmigrantes.
El convenio con Cáritas es asimismo "el primer paso", según Ricard Gomà, para redefinir el sistema de atención domiciliaria de Barcelona. El nuevo sistema, que se pondrá en marcha en 2005, permitirá aumentar los servicios que se prestan.
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