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Gallardón gastará 60 millones en alquilar dos edificios de San Blas

El Ayuntamiento trasladará la sede del Samur y el Departamento de Movilidad

El Ayuntamiento de Madrid se gastará 60.131.788 euros en el alquiler durante cinco años de dos edificios en el distrito de San Blas. Los inmuebles acogerán la sede del Samur y del Departamento de Movilidad, ambos de la Concejalía de Seguridad y Servicios a la Comunidad, y dos departamentos de la Concejalía de Hacienda. El PSOE califica la medida de "vergonzoso derroche". "Ya era una barbaridad que Ana Botella se gastara 11,5 millones en el alquiler de la sede de su Concejalía de Servicios Sociales, pero esto es aún peor", critica la edil Carmen Sánchez Carazo.

Los dos edificios están situados en una manzana de un polígono industrial de San Blas, entre las calles de Julián Camarillo, Albarracín, Miguel Fleta y Santa Leonor. Las obras de edificación ya están muy avanzadas y el traslado podría producirse durante el próximo verano.

El primero de estos inmuebles acogerá la sede del Samur-Protección Civil (11.955 metros cuadrados y 613 trabajadores) y parte del Departamento de Movilidad (2.833 metros cuadrados y 79 empleados). Ambos departamentos dependen de la Concejalía de Servicios a la Comunidad, cuyo titular es Pedro Calvo.

En total, el edificio, en el que quedarían otros 4.938 metros cuadrados libres para futuras necesidades, tiene una superficie construida de 19.726 metros cuadrados.

La Concejalía de Hacienda aprobó el pasado 19 de febrero 29,580 millones de euros por el alquiler de este inmueble. -3,497 para lo que queda de 2004, 6,289 millones anuales hasta 2008 y 0,926 para los primeros meses de 2009-. Ahora la sede del Samur está en la plaza de Legazpi, y los trabajadores de Movilidad, en la calle de Hermanos Álvarez Quintero, 3.

El segundo inmueble acogerá a 445 empleados del Departamento de Movilidad en 7.535 metros cuadrados; a 320 del Centro Municipal de Informática, 7.531 metros cuadrados, y a 85 del Departamento de Telecomunicaciones de la Concejalía de Hacienda, que ocuparán 2.480 metros cuadrados. El titular de la Concejalía de Hacienda es Juan Bravo.

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La superficie total de este edificio es de 17.547 metros cuadrados y su coste, según lo aprobado por Hacienda, ascenderá a 30,551 millones de euros hasta principios de 2009 -4,367 este año, 6,313 anual hasta 2008 y 0,929 en 2009-.

Los servicios municipales que serán trasladados a este inmueble se encuentran en la actualidad dispersos en varias dependencias municipales situadas en las plazas de la Villa, Legazpi y Jacinto Benavente, y en las calles Mayor, 72; Sacramento, 7, y Conde Duque, 9 y 11.

Contrato de cinco años

El primer contrato de alquiler de los dos edificios tiene una duración de cinco años, que serán prorrogables en nuevos acuerdos de otros cinco años. A los 60,132 millones de euros que el municipio se gastará en rentas hay que sumar los costes de compra o alquiler del mobiliario y equipos técnicos que necesiten los 1.542 empleados municipales en sus nuevas oficinas.

Juan Bravo, concejal de Hacienda, valora positivamente la decisión. "La adquisición de estos inmuebles, incluidos los gastos de mantenimiento e impuestos, habría supuesto un desembolso de unos 150 millones. Esto es un desembolso enorme, que habría ido a cargo a la deuda municipal, y que en un periodo de 15 años nos habría dejado un parque inmobiliario envejecido", afirma Bravo.

"Consideramos que el alquiler nos permite contar siempre con un parque de oficinas moderno sin descapitalizar los fondos del Ayuntamiento", añade el concejal de Hacienda.

El Grupo Municipal del PSOE en el Ayuntamiento, en cambio, se muestra muy crítico con la decisión. "Gastarse más de 60 millones de euros para este alquiler es un vergonzoso derroche de dinero. Por ese importe, es mejor comprar un edificio que luego será patrimonio municipal. El Ayuntamiento estuvo estudiando comprar un terreno en El Espinillo, junto al hospital Doce de Octubre, para la sede del Samur, pero no sabemos por qué ha rechazado esta opción", señala la concejal Carmen Sánchez Carazo.

Los socialistas, además, se muestran muy críticos con la ubicación del solar. "Esta zona de San Blas está lejos de las grandes arterias de comunicación y forma parte de un polígono industrial con calles estrechas, lo que dificulta la circulación de las ambulancias y patrullas de la Policía Municipal. Era mucho mejor la de El Espinillo porque estaba pegada a la M-30 y M-40", añade.

Sánchez Carazo también critica "el oscurantismo y las mentiras" con las que ha actuado el equipo de gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón. "Yo pregunté en la comisión informativa del mes de marzo sobre este asunto y se me contestó que no había nada decidido, que estaba estudiándose. Y ahora hemos sabido que Hacienda aprobó el gasto el 17 de febrero en la Junta de Gobierno", denuncia.

El precedente de Ana Botella

El alquiler de las nuevas sedes del Samur, el Departamento de Movilidad y otros servicios municipales no es la primera decisión en esta materia del equipo de gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón, alcalde de Madrid, que critica con fuerza la oposición.

Hace seis meses, el grupo socialista denunció que la Concejalía de de Empleo y Servicios al Ciudadano, cuya titular es Ana Botella, iba a gastarse 15 millones de euros en el alquiler y reforma de su nueva sede, situada en la calle de Ortega y Gasset (barrio de Salamanca).

"Esa decisión nos pareció muy cuestionable por el elevado coste y porque se trataba de situar una concejalía de fuerte contenido social en la zona más exclusiva de la ciudad. Pero este nuevo traslado nos parece aún menos comprensible, porque multiplica por cuatro el coste de la anterior", critica Carmen Sánchez Carazo, del PSOE.

Estas dos decisiones forman parte del nuevo modelo de gestión del patrimonio inmobiliario municipal emprendida por Ruiz-Gallardón desde que es alcalde.

Según un informe del Ayuntamiento, el municipio pretende "dotar a la administración de nuevos modelos de edificios" para lograr "una mayor eficacia administrativa y un mejor servicio al ciudadano".

El plan pretende revitalizar el centro histórico de la capital liberando edificios actualmente ocupados por servicios municipales y destinarlos a "equipamientos necesarios para la calidad de vida de los vecinos" y lograr que estas zonas sean "atractivas para la población joven".

Este objetivo no es, en principio, criticado por el PSOE. Lo que sí lo es, es la fórmula elegida para acoger a los servicios municipales trasladados. "Ruiz-Gallardón ha optado por concentrar servicios en grandes edificios para los que quiere pagar grandes rentas. Y esto sí que nos parece una enorme sangría para los presupuestos municipales, porque supone que cada año aumente el gasto en decenas de millones de euros que no aportan nada al Ayuntamiento", critica Sánchez Carazo.

Para los socialistas, habría que ver caso a caso la necesidad de los traslados y, una vez decididos, optar por la compra de inmuebles.

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