Europa se juega en una esquina

La atención futbolística del continente se volcará esta noche (TVE-1, 20.45) en su esquina noroeste, donde se dirime el primer acto de un duelo entre dos clubes vecinos, emparentados por una suerte de fraternidad atlántica. En la Copa de Europa más anómala desde que se instauró el sistema actual, el Deportivo defiende el último estandarte del fútbol español ante el Oporto, un equipo que en las dos últimas campañas ha hecho renacer el maltrecho prestigio de los clubes portugueses.

Al máximo interés que siempre reúne toda una semifinal de la Liga de Campeones, se une el colorido de un encuentro singular entre los clubes de dos ciudades separadas por tres horas de autopista y unidas por muchos lazos sentimentales, económicos y también futbolísticos.

El Deportivo viajó ayer en autobús desde A Coruña hasta Oporto por la misma ruta que hoy recorrerán unos 5.000 aficionados gallegos, todos los que consiguieron entrada para asistir al choque en el flamante y hermoso estadio de O Dragao, construido para albergar partidos de la eminente Eurocopa.

El club coruñés es muy consciente de que se encuentra ante una ocasión única para culminar una epopeya sin apenas precedentes en el fútbol continental, iniciada hace 14 años en las profundidades de la Segunda División. En el Deportivo hay futbolistas cargados de galones y de años, gente de la talla de Mauro Silva o Fran, que saben que el gran título que les falta para culminar sus carreras llegará "ahora o nunca", como se encargó de recordarles ayer el entrenador rival, José Mourinho. A primera vista, los rostros del Deportivo denotan serenidad. El conjunto que entrena Javier Irureta ha dado muchas muestras de madurez y viene de eliminar a los dos finalistas de la anterior edición, los italianos Juventus y Milan. Su rival de hoy tiene menos pedigrí, pero el Deportivo lo conoce demasiado bien como para desdeñarlo.

Seguramente este Oporto no llegue al nivel del que logró la Copa de Europa en 1987 frente al Bayern de Múnich, bajo el liderazgo de Futre y con aquel inolvidable gol de tacón del argelino Madjer. Más que de los futbolistas, en este equipo se habla de Mourinho, quien concita un insólito y unánime entusiasmo entre sus jugadores. "El Oporto se parece al Valencia. Es un equipo casi perfecto tácticamente", asegura Andrade, el defensa fichado por el Deportivo hace dos años al club portugués y que el lunes estuvo reunido con Irureta para explicarle algunos secretos de su antiguo conjunto. "Que nadie espere un partido de sentido único", aventura Mourinho. "Aquí y en A Coruña habrá dos encuentros de juego equilibrado y marcador equilibrado".

Alineaciones:

Oporto: Vítor Baía; Paulo Ferreira, Jorge Costa, Ricardo Carvalho, Nuno Valente; Alenitchev o Mendes, Costinha, Deco, Maniche; Mc Carthy y Carlos Alberto.

Deportivo: Molina; Manuel Pablo, Andrade, Naybet, Romero; Sergio, Mauro Silva; Víctor, Valerón, Luque o Fran; y Pandiani.