_
_
_
_
CARDIOLOGÍA

El enfado y la frustración pueden provocar arritmias en algunos pacientes con cardiopatías

El estrés mental relacionado con el enfado y la frustración puede por sí solo provocar peligrosas arritmias cardiacas en pacientes con tendencia a experimentar un ritmo cardiaco irregular, según ha confirmado un pequeño estudio con 29 pacientes publicado en Circulation. "Hay conocimientos populares y pruebas epidemiológicas de que la irritación puede provocar infartos de miocardio, pero éste es el primer estudio que demuestra que la tensión mental puede por sí sola provocar irregularidades específicas del ritmo cardiaco que identifican a los pacientes con una elevada vulnerabilidad a las arritmias", afirma el autor principal, Willem Kop.

Las arritmias son trastornos del ritmo cardiaco normal. Los investigadores estudiaron las variaciones del ritmo mientras los pacientes se encontraban bajo estrés mental o físico. "El estudio demuestra que el estrés mental agudo aumenta el riesgo de que se produzcan trastornos en el ritmo cardiaco, y que este trastorno provocado por el estrés mental se produce a ritmos cardiacos significativamente más bajos que los inducidos por el ejercicio", explica Kop. El investigador añade que los resultados probablemente resulten útiles para comprender que el estrés mental es capaz de provocar trastornos del ritmo cardiaco y ayuden a mejorar la capacidad de los médicos para predecir qué pacientes son vulnerables a arritmias mortales en potencia.

Para provocar estrés mental en los pacientes se pidió a los sujetos que recordaran un incidente reciente que los hubiera hecho enfadarse, y se les hizo restar múltiplos de siete de una cifra de cuatro dígitos mientras se les interrumpía de manera intermitente y se les decía que debían mejorar sus resultados.

Los resultados de este estudio "sugieren que las vías del sistema nervioso central y autónomo que participan en el estrés mental son diferentes de las involucradas en el esfuerzo físico", según Kop. La importancia de los resultados puede tener amplias aplicaciones clínicas, especialmente para los pacientes cardiacos de mayor edad y sedentarios, añadió. Pero advirtió que los resultados sólo se pueden aplicar a pacientes con umbrales arrítmicos bajos y enfermedad coronaria.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_