El PP se echará a "la calle" por la suspensión del trasvase del Ebro

El PP se echará a "la calle" para protestar por la decisión del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de suspender el trasvase del Ebro, una decisión que afecta a Valencia, Murcia y Almería. El presidente del PP andaluz, Javier Arenas, quien ayer tuvo su primer acto en Sevilla despojado de sus responsabilidades de Gobierno, apuntó que la defensa del Plan Hidrológico Nacional, en general, y del trasvase del Ebro, en particular, serán claves en la posición que hoy mantendrá el PP en el discurso de investidura de Manuel Chaves como presidente de la Junta.

Arenas, acompañado por la nueva cúpula del PP (el secretario general, Juan Ignacio Zoido, la presidenta del grupo parlamentario, Teófila Martínez, y el portavoz en la Cámara y coordinador regional, Antonio Sanz), señaló que su partido adoptará además medidas institucionales (como iniciativas en el Congreso, el Senado y los ayuntamientos) y jurisdiccionales, sin precisar éstas, para defender el trasvase del Ebro.

"La calle es de todos", afirmó Arenas para defender la iniciativa de convocar manifestaciones en defensa del trasvase. Además, anunció que a finales de esta semana mantendrá una reunión con los presidentes de la comunidad valenciana, Francisco Camps, y de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, ambos del PP, para defender el trasvase. "Pedimos para Andalucía el agua que se tira al mar", afirmó Arenas, quien añadió que convocará a los andaluces "más de una vez" para reclamar el trasvase, el primer asunto que el PP de Andalucía ha elegido para iniciar la oposición al Gobierno autonómico y central.

El presidente del PP evitó desvelar si su partido se sumará a la ponencia parlamentaria que Chaves ha anunciado para estudiar la reforma del Estatuto de Autonomía. Previamente, dijo, Chaves tiene que explicar "la necesidad y la utilidad" de la reforma y exponer el "texto". Arenas dijo que las propuestas que hizo Chaves en diciembre sobre la modificación no pasan de ser "reflexiones" y que su partido quiere hechos concretos para pronunciarse.

Arenas añadió que, en cualquier caso, el PP exigirá un "consenso" equivalente al que se logró con el actual Estatuto y alertó contra las modificaciones que sirvan de "coartada" a los proyectos del Gobierno vasco y el catalán. Además, expresó su temor acerca de que la reforma "degrade" el nivel estatutario del que goza Andalucía y se mostró partidario del "café para todos", es decir, que no haya desigualdades competenciales entre unas comunidades y otras.