Un ex consejero andaluz, director general de Obras Hidráulicas

Juan José López Martos, ex consejero andaluz de Obras Públicas, será el nuevo director general de Obras Hidráulicas del Ministerio de Medio Ambiente, según confirmaron ayer fuentes socialistas y de la Junta de Andalucía. Doctor ingeniero de caminos, canales y puertos, aportará al ministerio que dirigirá Cristina Narbona su amplia experiencia en la gestión del agua. En la década de los ochenta fue delegado del Gobierno en las confederaciones hidrográficas del Sur (CHS) y del Guadalquivir (CHG), y presidente de esta última confederación durante cinco años. López Martos (Adra, 1938), dejó la presidencia de la CHG para ser titular de Obras Públicas en el primer Ejecutivo andaluz presidido por Manuel Chaves (1990-1994). En 2001 volvió a la Junta para ser director del Instituto Andaluz del Agua, cargo que desempeñaba en la actualidad.

Como director general de Obras Hidráulicas, López Martos tendrá que afrontar la reforma del Plan Hidrológico Nacional (PHN) que dejó el PP en marcha. Los socialistas ya han adelantado que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero paralizará las primeras obras del trasvase del Ebro, el proyecto sobre el que se aposenta el PHN y que el PSOE no ejecutará. En un reciente artículo en este periódico, López Martos ya anticipaba como alternativas a una obra "tan discutible" como el trasvase del Ebro la generalización de "la desala-ción y la reutilización del agua" en zonas costeras y "el control de la demanda".

Confederaciones

López Martos también aboga por una revisión en profundidad de las confederaciones hidrográficas, que durante el Gobierno del PP han cedido buena parte de su iniciativa inversora a sociedades estatales. Su preocupación en los últimos años se ha centrado en aspectos socioeconómicos de la gestión del agua lo que le llevó a impulsar un amplio estudio en Andalucía, aún en elaboración, para determinar el coste real del agua, su productividad y cuánto paga cada sector.

Su nombramiento le permitirá volver a la primera línea de la gestión política, que abandonó como resultado del caso Ollero, por el que la Audiencia de Sevilla condenó en 1999 a su antiguo subordinado, el ex director autonómico de Carreteras, Manuel Ollero, por un delito de revelación de secreto en la adjudicación de una carretera en 1992. La Audiencia absolvió a López Martos, que consideró el caso "una cacería política". El tribunal, que condenó también a un hermano de Ollero y a dos directivos de la constructora Ocisa, reabrió este año la instrucción debido a que el Constitucional consideró ilegales las escuchas telefónicas en las que se basaba el caso.