Los chiíes respetan la tregua durante la fiesta religiosa de Kerbala

Un nuevo intento mediador entre las fuerzas de la Coalición y el clérigo radical chií Múqtada el Sáder estaba en marcha ayer, mientras se mantenía la tregua de sus milicianos en Kerbala para permitir la culminación del Arbaín. "Aún no hemos alcanzado un acuerdo, pero es un primer paso para hacer frente a la situación", confió ayer a esta enviada Adnan al Kadhem, del Partido Al Dawa y que participa en las conversaciones. La festividad religiosa chií transcurrió sin incidentes, pero con mucha menor participación de la prevista.

Según Al Kadhem, el borrador de acuerdo que han presentado a las partes tiene cinco puntos: la suspensión del proceso judicial contra Múqtada hasta el traspaso de soberanía; el desmantelamiento del Ejército del Mahdi (como se denomina su milicia); la devolución de todos los edificios oficiales a las autoridades (sin especificar a cuáles); medidas de confianza por ambas partes y garantías de que las fuerzas de la Coalición no entrarán en los lugares santos de Nayaf, Kerbala y Kufa.

Desde hace ocho días, los milicianos de Múqtada se han enfrentado a las fuerzas de la Coalición en los principales centros chiíes del país, logrando importantes victorias simbólicas como la toma de las tres ciudades santas chiíes o el control de puestos de policía y edificios públicos en otras. La violencia que estalló tras la detención de un representante del clérigo tomó cariz de revuelta tras conocerse que existe una orden de detención contra Múqtada por su presunta implicación en el asesinato, el 10 de abril del año pasado, de Abdelmayid al Joi, un clérigo rival.

"Empecemos la liberación"

"La situación debe evolucionar hacia la distensión", declaró en una conferencia de prensa en Nayaf Qais al Jasaali, un colaborador muy cercano de Múqtada. "Los mediadores nos han señalado que la respuesta de Estados Unidos llegará esta noche, sea positiva o negativa", añadió dando a entender que eran ellos los que habían realizado la propuesta. Los portavoces de la Coalición no se pronunciaron al respecto.

Pero a pesar del tono dialogante de Al Jasaali, en las proximidades del mausoleo del imam Husein en Kerbala aparecieron ayer pasquines en los que Múqtada pide a los iraquíes que se unan tras su milicia porque el Ejército del Mahdi les librará de la ocupación. "Uníos, hermanos míos, y empecemos la liberación", instaba en el texto.