El tráfico de droga permitió financiar los explosivos, según un auto judicial
El auto de prisión dictado el día 30 de madrugada por el juez Juan del Olmo contra Basel Ghayoun, uno de los presuntos autores materiales de los atentados del 11-M, y contra Hamid Ahmidan, pone de manifiesto que el tráfico de drogas hizo posible la relación entre algunos de los imputados y facilitó la financiación de la operación y la obtención de explosivos y detonadores que fueron utilizados en los atentados de los trenes de la muerte. En el registro de la casa de Ahmidan fueron intervenidos más de 20 kilos de hachís y cocaína.
El auto del juez dice textualmente: "(...) Tampoco pueden desconocerse las relaciones de todo el bloque de imputados hasta este momento, no sólo a nivel personal, sino conjugando con el elemento de radicalismo islámico, la realización de operaciones de tráfico de droga que permitieron una especial 'relación' de confianza entre concretos imputados facilitándose así una posible financiación delictiva y la obtención de sustancias explosivas y detonadores dentro del marco de dicha especial relación, cuyo fruto final fue la explosión del 11 de marzo de 2004 en Madrid".
Reconocido en foto
El auto del juez señala que Basel Ghayoun fue reconocido en fotografías por dos testigos como una de las personas que estaban en el lugar de los hechos el 11 de marzo y también menciona que otro de los implicados, "había sido visto por algunos testigos y lo identifican plenamente en un reconocimiento fotográfico depositando una bolsa en uno de los trenes que finalmente resultaron dañados".
Este segundo implicado es Jamal Zougam. En el auto de prisión se mencionan otros detalles relativos a su persona, como la tarjeta de telefonía móvil que le fue intervenida, que indirectamente sirven para identificarle.
Por otro lado, el juez Del Olmo acordó de nuevo la detención del marroquí Fouad El Morabit Anghar, de 28 años, que había sido detenido en la localidad toledana de Ugena el pasado día 25 por su presunta relación con Basel Ghayoun y puesto en libertad en la madrugada del día 30 por falta de indicios contra él. Este marroquí, que estudió ingeniería aeronáutica en la Universidad Politécnica de Madrid durante tres años, intentó completar su formación en la rama radioeléctrica en Alemania en octubre de 2003. Finalmente, recaló en Gijón (Asturias). La nueva orden de detención se debe a que la policía ha hallado sus huellas dactilares en el chamizo de Chinchón donde fueron montadas y activadas las mochilas bomba.
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