El PSE cree que el PNV rechaza su oferta de reformar el Estatuto por razones electorales

Los socialistas vascos creen que, si el PNV no acepta la "pista de aterrizaje de oro" que le han colocado con su oferta de modificar el Estatuto de Gernika a la catalana, el "plan Ibarretxe se convertirá en pura bandera electoral para disolver el Parlamento cuando más les convenga". El presidente del PSE-EE, Jesús Eguiguren, así lo cree y, además, advierte al PNV de Josu Jon Imaz y al lehendakari de que no intenten "puentear" en la negociación a los socialistas vascos porque el diálogo institucional Zapatero-Ibarretxe no sustituirá al PSE en la toma de decisión. "Lo que se consensúe será con el PSE", afirma.

Eguiguren indica a este periódico que a partir del jueves, día en el que se reunirá por primera vez la ponencia creada en el Parlamento vasco para tratar el plan Ibarretxe, "todo va a ser puro teatro, porque no hay forma de enmendar cosas concretas del plan. Es un problema de filosofía. El único debate que se va a producir es entre los tres partidos del propio Gobierno".

La duda de Eguiguren es si el PNV "quiere hablar en serio con nosotros y plantear una reforma estatutaria donde estemos todos los grupos, como en Cataluña, o, por el contrario, va a seguir en su objetivo de quitar votos a Batasuna con un plan que sólo le lleva al conflicto con el Estado". "El plan Ibarretxe es el obstáculo, una piedra de 10 toneladas, para empezar una nueva etapa política. Además, el método de diálogo que ofrecen los nacionalistas, plagado de condiciones, de 'aceptas la autodeterminación o no hay nada que hacer', lo hace inviable", dice.

Las claves sobre las que el PSE iniciaría una reforma del Estatuto han sido recogidas en dos documentos: el voto particular emitido por el PSE cuando se creó la ponencia sobre el autogobierno y la propuesta Más Estatuto.

- Estatuto, una herramienta para el bienestar del ciudadano. "El desarrollo estatutario ha ido poniendo en manos del País Vasco los medios indispensables para abordar con eficacia nuestros principales problemas políticos, económicos, sociales y culturales. Nos concede una evidente capacidad de decisión en prácticamente todos los ámbitos que tienen que ver con el bienestar de los ciudadanos vascos". Además, sin violencia, "es posible explorar todas las potencialidades que el Estatuto encierra para ampliar el consenso político" y después refrendar el acuerdo ante la sociedad.

- Desbloqueo institucional entre los Gobiernos central y vasco. Ambos Ejecutivos "deben llevar a cabo una lectura conjunta del Estatuto que permita, a la luz de la Constitución y de la doctrina constitucional, superar el bloqueo existente y establecer compromisos de materias y plazos".

- Completar las 37 transferencias pendientes en base a los informes aprobados en 1993 y 1995. "La Comunidad Autónoma del País Vasco ha asumido hasta 2001 un total de 18 transferencias, por lo que quedan 37 pendientes en áreas como Trabajo y Seguridad Social, Infraestructuras, Área Económico-Financiera, Industria, Educación e Investigación, Interior, Justicia, Cultura, Turismo y Agricultura y Pesca". "Junto a las que no ofrecen lugar a dudas en cuanto a titularidad de la competencia, existen otras de indudable complejidad jurídica y técnica, y unas terceras que, por ser de titularidad estatal, sólo pueden ser traspasadas a Euskadi en virtud de un proceso de delegación de competencias" vía leyes orgánicas.

- Seguridad Social y Empleo. El informe de transferencias aprobado en 1995, cuando PNV y PSE-EE gobernaban juntos en el País Vasco, ya dejaba claras las discrepancias existentes en estas materias en torno a la unidad de caja del sistema de Seguridad Social. En el área de Trabajo y Seguridad Social, el informe traza unos criterios para conformar convenios con el Estado para la gestión del régimen económico de la Seguridad Social. Y afirma explícitamente: "El Gobierno manifiesta su total unanimidad de criterio, con la especificidad de que PNV y EA entienden que los convenios para la gestión del régimen económico de la Seguridad Social expuestos deberán, también, establecer las relaciones económico-financieras de las instituciones vascas de Seguridad Social con las instituciones estatales de acuerdo con la metodología del Concierto". El PSE ofrece ahora incluso en esas materias "estudiar fórmulas que permitan llega a acuerdos de transición que dejen a salvo las reservas doctrinales de cada parte".

- Reforma del Senado. Convertir la Cámara alta en una "auténtica Cámara de representación, participación e integración de las comunidades autónomas en el Estado autonómico". Una reforma "en una perspectiva federal". Y también para dotarle de "capacidad para promover grandes planes nacionales o de cooperación entre Estado y comunidades autónomas, como los Planes Comunes de Cooperación en materias como inmigración, infraestructuras y medio ambiente". Y constituir una Conferencia de Presidentes para mantener un "diálogo institucional periódico".

- Presencia en Europa. El PSE plantea una "verdadera participación de los representantes institucionales del País Vasco en los Consejos de Ministros y órganos auxiliares, a través de compromisos y mecanismos de corresponsabilidad con el Estado".